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Fuente: Europa Sur
Los orígenes del Salvamento Marítimo organizado nos llevan a sociedades europeas del siglo XVII l exposición Salvamento Marítimo ha expuesto hasta el pasado domingo en Algeciras una muestra de su historia y medios
La Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítima ha presentado estos días en Algeciras una muestra de su historia y los medios de que dispone para llevar a cabo su labor. Se trataba de una exposición itinerante con motivo del quince aniversario de la creación de la sociedad, auspiciada por la Ley 27/1992 de Puertos del Estado y de la Marina Mercante.
Los centros de Salvamento Marítimo de Algeciras y mucho antes que éste el de Tarifa, conocido desde su creación como Tarifa-Tráfico son ya parte de la geografía del litoral del Campo de Gibraltar. Ambos forman parte de un amplio entramado puesto al servicio de la navegación para coordinar las operaciones de salvamento, pero también para luchar contra la contaminación.
Si nos adentramos en la historia, podemos visualizar lo que podemos considerar los orígenes de este servicio. En los paneles que ha venido mostrando esta exposición hemos podido observar cómo en el siglo XVIII la ciudad de Sevilla se dotó de lo que hoy puede considerarse como el primer dispositivo de salvamento a nivel de España del que queda constancia. Era el denominado Gremio de salvadores del Guadalquivir.
Como pioneros fue la Sociedad Benéfica de Salvamento de Naufragos y entre ellos, a nivel europeo la Sociedad de Salvamento de Ahogados de Amsterdam (1677). A mediados del siglo XIX empiezan a crearse tanto en Europa como en América sociedades privadas para salvaguardar la vida humana a lo largo de las costas. Los miembros eran voluntarios al servicio de un ideal. Para llevar a cabo su labor, las sociedades crearon estaciones de salvamento, utilizando los primeros botes de salvamento impulsados a remo.
Como antecedentes están las asociaciones de Santander, en 1773, Águilas (Murcia), en 1775 o la de Guipúzcoa. En España, en 1880 se funda la Sociedad Española de Salvamento de Náufragos, impulsado por Martín Ferreiro y Peralta. Un año después se aconseja la fabricación de una especie de huchas para distribuirlas en embarcaciones, capitanías y navieras para recoger donativos para pagar las actividades de la sociedad.
Entre las 63 juntas locales creadas, recordamos las de Algeciras, La Línea, Ceuta y Tarifa, cuyos restos de la sede aún existen. Se contaba con 65 botes salvavidas y más de mil tripulantes y rescatadoers voluntarios.
Envía tus convocatorias a viviraqui@europasur.com
Los orígenes del Salvamento Marítimo organizado nos llevan a sociedades europeas del siglo XVII l exposición Salvamento Marítimo ha expuesto hasta el pasado domingo en Algeciras una muestra de su historia y medios
La Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítima ha presentado estos días en Algeciras una muestra de su historia y los medios de que dispone para llevar a cabo su labor. Se trataba de una exposición itinerante con motivo del quince aniversario de la creación de la sociedad, auspiciada por la Ley 27/1992 de Puertos del Estado y de la Marina Mercante.
Los centros de Salvamento Marítimo de Algeciras y mucho antes que éste el de Tarifa, conocido desde su creación como Tarifa-Tráfico son ya parte de la geografía del litoral del Campo de Gibraltar. Ambos forman parte de un amplio entramado puesto al servicio de la navegación para coordinar las operaciones de salvamento, pero también para luchar contra la contaminación.
Si nos adentramos en la historia, podemos visualizar lo que podemos considerar los orígenes de este servicio. En los paneles que ha venido mostrando esta exposición hemos podido observar cómo en el siglo XVIII la ciudad de Sevilla se dotó de lo que hoy puede considerarse como el primer dispositivo de salvamento a nivel de España del que queda constancia. Era el denominado Gremio de salvadores del Guadalquivir.
Como pioneros fue la Sociedad Benéfica de Salvamento de Naufragos y entre ellos, a nivel europeo la Sociedad de Salvamento de Ahogados de Amsterdam (1677). A mediados del siglo XIX empiezan a crearse tanto en Europa como en América sociedades privadas para salvaguardar la vida humana a lo largo de las costas. Los miembros eran voluntarios al servicio de un ideal. Para llevar a cabo su labor, las sociedades crearon estaciones de salvamento, utilizando los primeros botes de salvamento impulsados a remo.
Como antecedentes están las asociaciones de Santander, en 1773, Águilas (Murcia), en 1775 o la de Guipúzcoa. En España, en 1880 se funda la Sociedad Española de Salvamento de Náufragos, impulsado por Martín Ferreiro y Peralta. Un año después se aconseja la fabricación de una especie de huchas para distribuirlas en embarcaciones, capitanías y navieras para recoger donativos para pagar las actividades de la sociedad.
Entre las 63 juntas locales creadas, recordamos las de Algeciras, La Línea, Ceuta y Tarifa, cuyos restos de la sede aún existen. Se contaba con 65 botes salvavidas y más de mil tripulantes y rescatadoers voluntarios.
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