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Fuente: Tribuna Campeche
Afirman ser víctimas de abuso sindical y de la paraestatal
“No tenemos ningún interés político, lo que queremos es que respeten nuestros derechos laborales y que las plazas ya autorizadas para los trabajadores de “La Volanta” sean devueltas a los que integramos esta cuadrilla”.
Así lo manifestaron algunos trabajadores sindicalizados transitorios que integran los roles K1 y K2, que sin previo aviso fueron dejados sin trabajo por la Sección 42 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) de la cual es secretario general Luis Gerardo Pérez Sánchez.
Los trabajadores afectados aseguran que esta situación se veía venir desde hace tres años, aproximadamente, “pues las plazas generadas las pretenden obtener los funcionarios y el propio secretario general, para repartirlas entre sus allegados”.
Ernesto Romero Martínez, integrante del rol K2, manifestó a TRIBUNA del Carmen que la cuadrilla “La Volanta”, que consta de dos cuadrillas o roles, el K1 y el K2, tiene una antigüedad de 12 años, y son los trabajadores que hasta hace unos días suplían a las cuadrillas —en cualquier instalación de perforación tanto de la Región Marina Sureste como Noreste— que se encontraban en capacitación o que por diversas causas cubrían a los trabajadores faltantes. El propósito, explicó, no parar las operaciones.
Sin embargo, dijo, el pasado 21 se presentaron para cubrir la guardia que les correspondía, pero se encontraron con la noticia de que las plazas que estaban cubriendo fueron canceladas temporalmente, por dos meses.
Romero Martínez manifestó que tanto él como sus compañeros consideran que esto fue una maniobra sórdida del dirigente sindical a nivel local, al tiempo que aseguraron tener conocimiento de que en ningún momento la empresa, a nivel central en la capital del país, ha cancelado dichas plazas.
Romero Martínez, Juan José Hernández García y Salvador Morales Abrego, este último con una antigüedad de 35 años en Pemex, recalcaron que esta maniobra del dirigente sindical Luis Gerardo Pérez Sánchez se debe a intereses particulares para obtener los votos necesarios para reelegirse, ya que esas 72 plazas pretende darlas a hijos de trabajadores de planta sindicalizados, para que voten por él.
Reconocieron que las plazas han sido canceladas por dos meses, para que de esta forma rescinda los respectivos contratos y los afectados no puedan pelear por sus derechos; sin embargo, ya se ampararon para que les sean entregadas las plazas que les corresponden, “porque fueron abiertas para ellos”.
De igual forma, indicaron que desde hace más de tres años iniciaron las presiones por parte de los funcionarios sindicales y de la propia directiva de la Sección 42, para que renuncien a sus puestos base, con lo que quedarían completamente desamparados.
Afirmaron que al no ceder ante la presión, la sección sindical buscó la forma de dejarlos sin trabajo y quitarles la oportunidad de tener plazas definitivas, haciéndoles efectivo, el pasado miércoles 21, la cancelación de las plazas.
Por tal motivo, dijo, en vista de la escasa respuesta de las autoridades de Petróleos Mexicanos y ante la negativa del secretario general sindical de darles la cara por esta situación o de reinstalarlos en sus trabajos, 18 de ellos decidieron iniciar una huelga de hambre, por lo que se apostaron frente a las instalaciones de las oficinas de dicha sección sindical.
Morales Abrego, por su parte, aseguró que son falsas las declaraciones respecto a que fueron reinstalados algunos de estos trabajadores, pues fueron amenazados por la dirigencia sindical de que si no renunciaban a sus plazas actuales no les darían de nuevo trabajo, y algunos de ellos renunciaron por la necesidad del empleo y otros por desconocer los derechos que tienen.
Señalaron que los artífices de esta sucia artimaña son la dirigencia sindical y funcionarios de la Unidad de Perforación y Mantenimiento a Pozos, que más bien se prestaron a esta acción, y señalan directamente como responsables a Pablo Martínez López, de Recursos Humanos de la Unidad Operativa Noreste (UONE) y al titular de la Coordinación de Recursos Humanos de Perforación, Sebastián Sánchez de la Cruz.
Afirmaron que estos últimos se prestaron a las artimañas de Luis Gerardo Pérez Sánchez, cancelando temporalmente las plazas para reabrirlas dentro de dos meses, y ellos quedar sin ningún derecho a reclamarlas, o sea, a quedar sin trabajo y perder su antigüedad.
Afirman ser víctimas de abuso sindical y de la paraestatal
“No tenemos ningún interés político, lo que queremos es que respeten nuestros derechos laborales y que las plazas ya autorizadas para los trabajadores de “La Volanta” sean devueltas a los que integramos esta cuadrilla”.
Así lo manifestaron algunos trabajadores sindicalizados transitorios que integran los roles K1 y K2, que sin previo aviso fueron dejados sin trabajo por la Sección 42 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) de la cual es secretario general Luis Gerardo Pérez Sánchez.
Los trabajadores afectados aseguran que esta situación se veía venir desde hace tres años, aproximadamente, “pues las plazas generadas las pretenden obtener los funcionarios y el propio secretario general, para repartirlas entre sus allegados”.
Ernesto Romero Martínez, integrante del rol K2, manifestó a TRIBUNA del Carmen que la cuadrilla “La Volanta”, que consta de dos cuadrillas o roles, el K1 y el K2, tiene una antigüedad de 12 años, y son los trabajadores que hasta hace unos días suplían a las cuadrillas —en cualquier instalación de perforación tanto de la Región Marina Sureste como Noreste— que se encontraban en capacitación o que por diversas causas cubrían a los trabajadores faltantes. El propósito, explicó, no parar las operaciones.
Sin embargo, dijo, el pasado 21 se presentaron para cubrir la guardia que les correspondía, pero se encontraron con la noticia de que las plazas que estaban cubriendo fueron canceladas temporalmente, por dos meses.
Romero Martínez manifestó que tanto él como sus compañeros consideran que esto fue una maniobra sórdida del dirigente sindical a nivel local, al tiempo que aseguraron tener conocimiento de que en ningún momento la empresa, a nivel central en la capital del país, ha cancelado dichas plazas.
Romero Martínez, Juan José Hernández García y Salvador Morales Abrego, este último con una antigüedad de 35 años en Pemex, recalcaron que esta maniobra del dirigente sindical Luis Gerardo Pérez Sánchez se debe a intereses particulares para obtener los votos necesarios para reelegirse, ya que esas 72 plazas pretende darlas a hijos de trabajadores de planta sindicalizados, para que voten por él.
Reconocieron que las plazas han sido canceladas por dos meses, para que de esta forma rescinda los respectivos contratos y los afectados no puedan pelear por sus derechos; sin embargo, ya se ampararon para que les sean entregadas las plazas que les corresponden, “porque fueron abiertas para ellos”.
De igual forma, indicaron que desde hace más de tres años iniciaron las presiones por parte de los funcionarios sindicales y de la propia directiva de la Sección 42, para que renuncien a sus puestos base, con lo que quedarían completamente desamparados.
Afirmaron que al no ceder ante la presión, la sección sindical buscó la forma de dejarlos sin trabajo y quitarles la oportunidad de tener plazas definitivas, haciéndoles efectivo, el pasado miércoles 21, la cancelación de las plazas.
Por tal motivo, dijo, en vista de la escasa respuesta de las autoridades de Petróleos Mexicanos y ante la negativa del secretario general sindical de darles la cara por esta situación o de reinstalarlos en sus trabajos, 18 de ellos decidieron iniciar una huelga de hambre, por lo que se apostaron frente a las instalaciones de las oficinas de dicha sección sindical.
Morales Abrego, por su parte, aseguró que son falsas las declaraciones respecto a que fueron reinstalados algunos de estos trabajadores, pues fueron amenazados por la dirigencia sindical de que si no renunciaban a sus plazas actuales no les darían de nuevo trabajo, y algunos de ellos renunciaron por la necesidad del empleo y otros por desconocer los derechos que tienen.
Señalaron que los artífices de esta sucia artimaña son la dirigencia sindical y funcionarios de la Unidad de Perforación y Mantenimiento a Pozos, que más bien se prestaron a esta acción, y señalan directamente como responsables a Pablo Martínez López, de Recursos Humanos de la Unidad Operativa Noreste (UONE) y al titular de la Coordinación de Recursos Humanos de Perforación, Sebastián Sánchez de la Cruz.
Afirmaron que estos últimos se prestaron a las artimañas de Luis Gerardo Pérez Sánchez, cancelando temporalmente las plazas para reabrirlas dentro de dos meses, y ellos quedar sin ningún derecho a reclamarlas, o sea, a quedar sin trabajo y perder su antigüedad.
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