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Fuente: LNE
J. L. A.
La autopista del mar entre Gijón y Nantes-Saint Nazaire podría representar un millón de toneladas más para El Musel en su primer año de funcionamiento. Esta cifra es el resultado de calcular el número de transportes que debe utilizar la línea en los primeros doces meses de servicio, 25.000 camiones o el equivalente a su carga, por las toneladas que suele mover cada uno de estos vehículos pesados.
Son, claro está, cifras optimistas para cuyo cálculo se parte de la premisa de que El Musel podrá cumplir las duras exigencias del concurso de adjudicación de las autopistas del mar. El presidente de la Autoridad Portuaria de Gijón, Fernando Menéndez Rexach, subrayaba el pasado martes en Quinta La Vega, en un encuentro con periodistas, que la terminal local deberá dar servicio a unos 10.000 camiones en 2009 si finalmente, tal y como está previsto, esta conexión con Nantes, en la costa occidental gala, entra en servicio en el segundo semestre de este año.
Aún no hay plazos establecidos y ni siquiera la adjudicación se ha hecho aún oficial. Ha trascendido, sin embargo, que las ofertas de Gijón y Vigo son las que ha seleccionado una comisión gubernamental hispano-francesa para la concesión de estas primeras autopistas del mar con Francia. El enlace tiene unas subvenciones de 30 millones de euros y responde a las exigencias de la política de transportes de la Comisión Europea, que quiere descongestionar las carreteras continentales.
Rexach ya ha adelantado que la nueva conexión marítima tendrá tres escalas a la semana y que el viaje entre El Musel y Saint Nazaire, el puerto de Nantes, durará unas 14 horas. El coste de embarque para cada camión será de 450 euros. Algunos transportistas consultados por este diario opinan que el tiempo de trayecto previsto y el precio anunciado por Rexach no parecen muy competitivos. «Son las mismas horas que tardamos en llegar a París», manifestaron. Otros, en cambio, destacan que la vía marítima puede tener éxito si se agilizan los servicios. «Los tiempos de espera en los puertos suponen un chorro de dinero para las empresas y para los transportistas», recalcaron. Es un debate abierto.
Directivos de los puertos de Gijón y Nantes han mantenido algunas entrevistas para analizar las operaciones necesarias. La autopista del mar de El Musel fue presentada al concurso hispano-francés por las navieras franco-italianas GLD Lines y CMA-CGM. La firma Grimaldi tiene una importante experiencia en este tipo de servicio en el Mediterráneo, en conexiones entre terminales italianas y españolas.
Mientras los responsables portuarios de Vigo, propuesta que presentó Acciona Mediterránea, con enlaces hacia Algeciras y Le Havre, quieren poner a prueba su autopista del mar antes incluso de la adjudicación oficial, otros puertos del Cantábrico toman posiciones ante un negocio que concentra importantes apoyos de la Unión Europea.
Es el caso de Bilbao, que tiene una conexión con Zeebrugge (Brujas), en Bélgica, y ayudas del Gobierno vasco para la utilización de esta línea. Y también del puerto de Santander, apeado del concurso que se resolverá a favor de Gijón y Vigo. El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha dado su apoyo a la negociación entre la terminal santanderina y Nantes. Rexach ha dejado claro que, en todo caso, es incorrecto hablar de una autopista del mar: «Son las que son».
Los transportes que reciba Gijón de Nantes-Saint Nazaire permitirán a El Musel diversificar su perfil portuario y aumentar los tráficos. El último ejercicio no ha sido bueno por la fuerte caída de las importaciones de carbón térmico.
La autopista del mar entre Gijón y Nantes-Saint Nazaire podría representar un millón de toneladas más para El Musel en su primer año de funcionamiento. Esta cifra es el resultado de calcular el número de transportes que debe utilizar la línea en los primeros doces meses de servicio, 25.000 camiones o el equivalente a su carga, por las toneladas que suele mover cada uno de estos vehículos pesados.
Son, claro está, cifras optimistas para cuyo cálculo se parte de la premisa de que El Musel podrá cumplir las duras exigencias del concurso de adjudicación de las autopistas del mar. El presidente de la Autoridad Portuaria de Gijón, Fernando Menéndez Rexach, subrayaba el pasado martes en Quinta La Vega, en un encuentro con periodistas, que la terminal local deberá dar servicio a unos 10.000 camiones en 2009 si finalmente, tal y como está previsto, esta conexión con Nantes, en la costa occidental gala, entra en servicio en el segundo semestre de este año.
Aún no hay plazos establecidos y ni siquiera la adjudicación se ha hecho aún oficial. Ha trascendido, sin embargo, que las ofertas de Gijón y Vigo son las que ha seleccionado una comisión gubernamental hispano-francesa para la concesión de estas primeras autopistas del mar con Francia. El enlace tiene unas subvenciones de 30 millones de euros y responde a las exigencias de la política de transportes de la Comisión Europea, que quiere descongestionar las carreteras continentales.
Rexach ya ha adelantado que la nueva conexión marítima tendrá tres escalas a la semana y que el viaje entre El Musel y Saint Nazaire, el puerto de Nantes, durará unas 14 horas. El coste de embarque para cada camión será de 450 euros. Algunos transportistas consultados por este diario opinan que el tiempo de trayecto previsto y el precio anunciado por Rexach no parecen muy competitivos. «Son las mismas horas que tardamos en llegar a París», manifestaron. Otros, en cambio, destacan que la vía marítima puede tener éxito si se agilizan los servicios. «Los tiempos de espera en los puertos suponen un chorro de dinero para las empresas y para los transportistas», recalcaron. Es un debate abierto.
Directivos de los puertos de Gijón y Nantes han mantenido algunas entrevistas para analizar las operaciones necesarias. La autopista del mar de El Musel fue presentada al concurso hispano-francés por las navieras franco-italianas GLD Lines y CMA-CGM. La firma Grimaldi tiene una importante experiencia en este tipo de servicio en el Mediterráneo, en conexiones entre terminales italianas y españolas.
Mientras los responsables portuarios de Vigo, propuesta que presentó Acciona Mediterránea, con enlaces hacia Algeciras y Le Havre, quieren poner a prueba su autopista del mar antes incluso de la adjudicación oficial, otros puertos del Cantábrico toman posiciones ante un negocio que concentra importantes apoyos de la Unión Europea.
Es el caso de Bilbao, que tiene una conexión con Zeebrugge (Brujas), en Bélgica, y ayudas del Gobierno vasco para la utilización de esta línea. Y también del puerto de Santander, apeado del concurso que se resolverá a favor de Gijón y Vigo. El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha dado su apoyo a la negociación entre la terminal santanderina y Nantes. Rexach ha dejado claro que, en todo caso, es incorrecto hablar de una autopista del mar: «Son las que son».
Los transportes que reciba Gijón de Nantes-Saint Nazaire permitirán a El Musel diversificar su perfil portuario y aumentar los tráficos. El último ejercicio no ha sido bueno por la fuerte caída de las importaciones de carbón térmico.
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