HPH quiso vender acciones de TIDE

Fuente: La Hora

Los representantes de la empresa Terminales Internacionales del Ecuador (TIDE), concesionaria del puerto, fueron herméticos para dar declaraciones cuando se producían conflictos con los representantes de Autoridad Portuaria de Manta (APM).

En las últimas semanas, cuando se comenzó a conocer el posible abandono del proyecto, la tónica ha sido la misma. El hermetismo siguió primando.

Los datos sobre la posición de TIDE en torno al problema, son versiones recogidas de algunas cartas enviadas, desde Hong Kong o Panamá, a las autoridades de APM.

Una primera misiva enviada a Lucía Fernández -presidenta de APM- el 5 de febrero de 2009, dio cuenta que la posición de TIDE y su filial Hutchison Port Holding (HPH), era dejar de administrar el puerto.

El 16 de febrero de 2009, la respuesta de Hong Kong fue que HPH considera que los cambios a los términos del contrato de concesión, unilateralmente impuestos por APM, son inaceptables, y la amenaza hecha por el Gobierno del Ecuador de terminar el contrato de concesión, no tiene asidero legal.

La reflexión de Gerry Jim, un alto directivo del consorcio chino, “es que las relaciones con APM se han deteriorado durante los últimos dos años, al punto que la renegociación de las consideraciones económicas, no son procedentes debido a las constantes amenazas sufridas por TIDE, en cuanto a la cancelación del contrato y otros requerimientos unilateralmente impuestos por APM, que no estaban dentro de los acuerdos logrados en el contrato de concesión”, recalca.

Según Gerry Jim, los directivos de HPH entienden que debido a los recientes cambios en la Constitución de la República del Ecuador, acuerdos de concesión a largo plazo con la participación de la iniciativa privada para el desarrollo y administración de los puertos, no serán posibles.

“Estamos preparados para ayudar al Gobierno a preservar la estructura de la concesión del puerto de Manta, y para vender todas las acciones de TIDE”, explica Jim.

El funcionario dice que siendo TIDE el propietario actual del paquete accionario, está dispuesto a vender las acciones, cuyo valor es de un dólar, a un nuevo inversionista que apruebe el gobierno ecuatoriano.

“Si esta propuesta es considerada conveniente para el Gobierno, nosotros necesitamos concretar un acuerdo de venta el 27 de febrero de 2009, antes de que se cumpla la retirada de TIDE de la concesión el día 28 de febrero de 2009, tal como lo había notificado el 05 de febrero de 2009”, agrega Jim.

Términos

En efecto, no hubo una venta y TIDE se retiró el pasado sábado.

Los términos de HPH, que sumaban 13 puntos, señalaban que venderán al nuevo inversionista la totalidad del negocio, incluidos los bienes generados al cierre (24 de febrero de 2009), con la excepción del dinero en efectivo, balances de bancos y la grúa móvil.

También indica que todas las cuentas por pagar que TIDE mantenga con sus acreedores, ya sea indirecta o directamente, y cualquier otro compromiso adquirido que no se haya cumplido a la fecha de la firma del acuerdo de la venta, las asumirá el nuevo inversionista.

Todas las reclamaciones pendientes de incumplimiento del contrato de concesión y las notificaciones de las multas impuestas por la APM y el Gobierno, las asumirá el nuevo inversionista al momento del acuerdo de venta.

La grúa no se toca

° Según los directivos de HPH, con el ánimo de cooperar con el nuevo inversionista, le permitirán el uso de la grúa móvil, si lo desea, pero conforme a los siguientes lineamientos:

Ese uso de la grúa móvil será gratuito desde el 1 de marzo de 2009 hasta el 29 de febrero del 2012, con la finalidad de que el nuevo inversionista tenga tiempo para adquirir su propio equipo de movilización de contenedores, sin la necesidad de pago por renta.

Si la grúa móvil es requerida para operaciones después del 29 de febrero de 2012, el nuevo inversionista pagará a HPH una renta anual de USD 800.000.

Esta oferta está hecha en base a que el nuevo inversionista le dará todo el mantenimiento necesario a la grúa para que esté completamente operativa, asumiendo los costos que ello demanda. Cuando la grúa ya no sea requerida, “nosotros (los de HPH) nos encargaremos de venderla o reubicarla, asumiendo los gastos del movimiento”.