Investigan posible clonación de remolcadores

Fuente: La Republica Colombia
Heberto Amor Beltrán /Fidel Camilo Gómez /Barranquilla-Cartagena

Una voz de alerta fue lanzada en las últimas horas en el sector naviero y portuario del Caribe colombiano, a raíz de la investigación que adelantan las autoridades ante lo que podría ser un caso de clonación de naves para evadir impuestos.

De acuerdo con informaciones conocidas por este Diario, el 12 de enero pasado la Dian retuvo en Cartagena un remolcador denominado “Alex” (entendiéndose por remolcador la nave cuya función es jalar los barcos a los puertos de atraque), de propiedad de la empresa Operaciones Técnicas Marítimas (OTM).
El nombre de la nave retenida, curiosamente, coincide con otra nave de la misma empresa que presta servicio en el Puerto de Coveñas y que, según los funcionarios de la entidad de aduanas, sí está legalmente registrada.
La retención se produjo por la no presentación de la documentación completa por parte de OTM, relacionada con la importación del equipo al país, marcas de denominación y puerto de matrícula exigidos por la normatividad marítima, y según lo confirmó el Administrador de Aduanas de la Dian en Cartagena, Capitán Humberto Ángulo Montero, el caso está en investigación.
Debido a que la empresa no ha podido certificar con documentos los datos de importación, la nave fue aprehendida, lo que significa que está formalmente retenida por la presunta existencia de una infracción de tipo aduanero.
Fuentes relacionadas con el sector portuario de Barranquilla manifiestan que la posible existencia de dos remolcadores con el mismo nombre llama la atención, porque significaría que una de las dos naves no se encuentra registrada ante la Dimar o, si lo está, opera usurpando el nombre de otra igualmente registrada, lo que generaría un incumplimiento de la legislación marítima y comercial colombiana.

Medidas

Ante la gravedad de los hechos y con el fin de frenar este tipo de comportamientos, la Dian y la Dimar alistan para los próximos días una serie de operativos de control tendientes a verificar el cumplimiento de las obligaciones aduaneras y de operación.
Por su lado, la Dian investiga la posible comisión de delitos relacionados con evasión fiscal, pero se advierte que no hay vinculación a acciones de otro tipo en lo penal.
La presidenta de la Asociación Nacional de Remolcadores (Asorecol) María del Rosario Sintes, se mostró preocupada con este tipo de comportamientos y calificó de “grave” la actitud de la empresa en caso de que se le comprueben los hechos.
“Los remolcadores son un elemento esencial para la operación portuaria y naviera y por ello es preocupante que se presente este tipo de circunstancias”, aseguró la dirigente. De acuerdo con Sintes, éste no es el primer caso de “clonación”, pues en 2005 Asorecol reportó otro similar ante la Dimar.
El gremio propuso que para evitar este tipo de comportamientos, se vuelva más estricta la regulación y control. “Es necesario establecer una metodología, similar a la que existe para la distinción de vehículos automotores, y que sea aplicable a las embarcaciones”, dijo.
De acuerdo con un estudio de Asorecol, durante los próximos meses seguirá llegando al país este tipo de equipos ante la demanda que van a generar el TLC con Estados Unidos y tratados similares con otros países.
En los últimos años se han invertido 80 millones de dólares en la importación de estas motonaves; además, se cuenta con cuatro remolcadores construidos en el país en los antiguos astilleros de Conastil en Cartagena, y en los talleres de Unial en Barranquilla, con lo que se ha contribuido al desarrollo naval del país.
“Por otra parte, cabe destacar que entre finales de 2006 y principios del presente año llegarán al país tres remolcadores más de última generación para complementar y modernizar la flota ya existente, como preparación al incremento de la demanda gracias a la firma del TLC”, dijo Sintes.
El presidente de la Asociación Nacional de Operadores Portuarios (Asoport), Gonzalo Muñoz Arboleda, también se mostró extrañado y al mismo tiempo advirtió que estas firmas no tienen herramientas para saber si ese tipo de embarcaciones cumplen con la legislación aduanera o no. “Es como si uno toma un taxi en el aeropuerto, uno no pregunta antes si el vehículo es de contrabando o tiene los papeles al día”, dijo Muñoz.
LA REPUBLICA intentó comunicarse en repetidas ocasiones con las directivas de OTM en Cartagena, pero el gerente general, Jorge Martínez, ni otros funcionarios se refirieron al tema.