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From: Pedro de Jesús Miranda Castillo pjmc37@hotmail.com
Subject: RE: FELICITACIONES A LOS MARINOS
A la Gente de Mar:
El Viernes 19 de diciembre durante un convivio Navideño en la Asociación Sindical de Oficiales de Máquinas escuchaba atentamente al Capitán Miguel A. Romero Caldelas, quien a respuesta del Capitán Joaquín Dorantes le recordaba que en fecha mencionada habría vuelto a nacer nuestro muy querido amigo y marino Caldelas.
La narración del Capitán Romero Caldelas vino a mi mente los recuerdos de aquellos de aquellos comentarios que se daban en los muelles y buques atracados en el puerto de Veracruz sobre el hundimiento del Buque "Tlaxcala", aqul diciembre de 1975.
No soy marino, sin embargo siempre he admirado a la Gente de Mar, quienes arriesgan su vida diariamente sorteando muchas veces las inclemencias del tiempo para llevar las cargas que son enviadas a otros puertos del mundo y de aquellas cargamentos de donde se traen para insumos y alimentos que requiere la gente que vive en este país como en cualquier otro del mundo.
Habiendo sido trabajador portuario durante muchos años, siempre pensé que nuestro trabajo provenía del flujo de los cargamentos que manejábamos y que estos eran transportados en los buques que atravesaban los océanos, con los peligros que se han narrado y que muchos de estos casos se han publicado en libros y llevados a la pantalla en los que para muchos son deleite cuando piensan que las películas tienen mucho de ficción.
Creanme mis amigos marinos que el día de hoy al leer los recortes períodisticos publicados en aquel mes de diciembre de 1975, me hicieron sentir un nudo en la garganta. Sin embargo, también se relata la heroicidad del Cap. Joel Montes Camarena. Quien ofrendó su vida al mar y organizando el abandono del buque prefirió hundirse con honor con su barco.
Estas hazañas solamente se comentaban y eran comunes en épocas de antaño, donde el capitán y el buque que un país o un naviero le encomendaban, era una deshonra para un Capitán llegar a salvo a puerto y dejar hundido su barco y muchos de sus tripulantes en el estomago de algún tiburón.
Sin duda y sin ficción las narraciones del nuestro amigo el Capitán Miguel A. Romero Caldelas después de 33 años del hundimiento hacían que entre risas y recuerdos después de la tragedia observaramos además del heroísmo del Cap. Montes Camerena, la solidaridad y amor para su esposa e hija quienes no podrían haber salvado la vida en las aguas tormentosas e infestadas de tiburones.
Sentados y conviviendo con los ricos bocadillos y cervezas y refrescos junto al Cap. Dorantes, le dije estas narraciones se deben documentar en un libro para que sean conocidas ahora por las nuevas generaciones.
Claro está, que no para alarmar a los alumnos que tienen vocación de cruzar los mares. Ya que ahora la Organización Marítima Internacional (OMI) y la OIT exige que las naves cumplan con las medidas de seguridad que antes no se llevaban a cabo. El B/M Tlaxcala era uno de los buques que prestaron servicio en la Segunda Guerra Mundial, un buque muy viejo y que a vistas no cumplían con las normas mínimas de seguridad.
Por que digo lo anterior, trabajé en ese buque como estibador cuando se utilizaba para transportan azúcar mascabado ondeando bandera extranjera ,,y luego transportaba alúmina y briquetas de carbón, con bandera mexicana. Con esos buques viejos y los muy ya trabajados de la Línea Noruega Browing inicio su expansión como empresa Naviera Transportación Marítima Mexicana.
Con el trabajo de los marinos mexicanos, con el enfrentamiento a los peligros el Lic. Serrano pudo engrandecer la flota de TMM con ya modernos buques Porta-Contenedores, y sin importar el sacrificio de los marinos que le hicieron incrementar su capital vendió buques y líneas navieras en el Atlántico y Pacifico para entrar a la licitación de unas de las Líneas Ferroviarias ahora conocidas como TFM.
Me pregunto ¿Quien habrá reconocido el trabajo de la Gente de Mar? Nadie sería la respuesta verdadera. Ahora bien, agradezco al Capitán Dorantes y al Capitán Romero Caldelas el envío de los recortes períodisticos de aquellos días de diciembre de 1975.
Espero que el Capitán Dorantes quien tiene grandes habilidades con la pluma, estos hechos los publique en un libro el cual será un homenaje aquellos marinos que ofrendaron su vida al mar y también de aquellos que Dios les permitió estar con vida.
Al Capitán Dorantes excelente Curador de la biblioteca del FUMMAC le pediría que recopilara muchos de aquellos hecho heroicos de los marinos mexicanos para que se dieran a conocer a todos las personas que gustan de la lectura.
Aprovecho la ocasión para desearles una Feliz Navidad y Próspero Año 2009.
Saludos
Pedro
A la Gente de Mar:
El Viernes 19 de diciembre durante un convivio Navideño en la Asociación Sindical de Oficiales de Máquinas escuchaba atentamente al Capitán Miguel A. Romero Caldelas, quien a respuesta del Capitán Joaquín Dorantes le recordaba que en fecha mencionada habría vuelto a nacer nuestro muy querido amigo y marino Caldelas.
La narración del Capitán Romero Caldelas vino a mi mente los recuerdos de aquellos de aquellos comentarios que se daban en los muelles y buques atracados en el puerto de Veracruz sobre el hundimiento del Buque "Tlaxcala", aqul diciembre de 1975.
No soy marino, sin embargo siempre he admirado a la Gente de Mar, quienes arriesgan su vida diariamente sorteando muchas veces las inclemencias del tiempo para llevar las cargas que son enviadas a otros puertos del mundo y de aquellas cargamentos de donde se traen para insumos y alimentos que requiere la gente que vive en este país como en cualquier otro del mundo.
Habiendo sido trabajador portuario durante muchos años, siempre pensé que nuestro trabajo provenía del flujo de los cargamentos que manejábamos y que estos eran transportados en los buques que atravesaban los océanos, con los peligros que se han narrado y que muchos de estos casos se han publicado en libros y llevados a la pantalla en los que para muchos son deleite cuando piensan que las películas tienen mucho de ficción.
Creanme mis amigos marinos que el día de hoy al leer los recortes períodisticos publicados en aquel mes de diciembre de 1975, me hicieron sentir un nudo en la garganta. Sin embargo, también se relata la heroicidad del Cap. Joel Montes Camarena. Quien ofrendó su vida al mar y organizando el abandono del buque prefirió hundirse con honor con su barco.
Estas hazañas solamente se comentaban y eran comunes en épocas de antaño, donde el capitán y el buque que un país o un naviero le encomendaban, era una deshonra para un Capitán llegar a salvo a puerto y dejar hundido su barco y muchos de sus tripulantes en el estomago de algún tiburón.
Sin duda y sin ficción las narraciones del nuestro amigo el Capitán Miguel A. Romero Caldelas después de 33 años del hundimiento hacían que entre risas y recuerdos después de la tragedia observaramos además del heroísmo del Cap. Montes Camerena, la solidaridad y amor para su esposa e hija quienes no podrían haber salvado la vida en las aguas tormentosas e infestadas de tiburones.
Sentados y conviviendo con los ricos bocadillos y cervezas y refrescos junto al Cap. Dorantes, le dije estas narraciones se deben documentar en un libro para que sean conocidas ahora por las nuevas generaciones.
Claro está, que no para alarmar a los alumnos que tienen vocación de cruzar los mares. Ya que ahora la Organización Marítima Internacional (OMI) y la OIT exige que las naves cumplan con las medidas de seguridad que antes no se llevaban a cabo. El B/M Tlaxcala era uno de los buques que prestaron servicio en la Segunda Guerra Mundial, un buque muy viejo y que a vistas no cumplían con las normas mínimas de seguridad.
Por que digo lo anterior, trabajé en ese buque como estibador cuando se utilizaba para transportan azúcar mascabado ondeando bandera extranjera ,,y luego transportaba alúmina y briquetas de carbón, con bandera mexicana. Con esos buques viejos y los muy ya trabajados de la Línea Noruega Browing inicio su expansión como empresa Naviera Transportación Marítima Mexicana.
Con el trabajo de los marinos mexicanos, con el enfrentamiento a los peligros el Lic. Serrano pudo engrandecer la flota de TMM con ya modernos buques Porta-Contenedores, y sin importar el sacrificio de los marinos que le hicieron incrementar su capital vendió buques y líneas navieras en el Atlántico y Pacifico para entrar a la licitación de unas de las Líneas Ferroviarias ahora conocidas como TFM.
Me pregunto ¿Quien habrá reconocido el trabajo de la Gente de Mar? Nadie sería la respuesta verdadera. Ahora bien, agradezco al Capitán Dorantes y al Capitán Romero Caldelas el envío de los recortes períodisticos de aquellos días de diciembre de 1975.
Espero que el Capitán Dorantes quien tiene grandes habilidades con la pluma, estos hechos los publique en un libro el cual será un homenaje aquellos marinos que ofrendaron su vida al mar y también de aquellos que Dios les permitió estar con vida.
Al Capitán Dorantes excelente Curador de la biblioteca del FUMMAC le pediría que recopilara muchos de aquellos hecho heroicos de los marinos mexicanos para que se dieran a conocer a todos las personas que gustan de la lectura.
Aprovecho la ocasión para desearles una Feliz Navidad y Próspero Año 2009.
Saludos
Pedro
1 comentario:
Muy interesante la publicacion!
gracias!
saludos
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