Fuente: La Jornada
CARLOS TORRES OSEGUERA (Corresponsal)
Lazaro cardenas, 19 de julio.- Pescadores de la desembocadura del río Balsas exigieron las autoridades la limpieza del lecho del río en donde se construye el puente Bicentenario, y la suspensión de trabajos de enrrocamiento en las inmediación de la barra de San Francisco, argumentando que afecta a la migración de sardina para el desove, que adquieren los pescadores como carnada. El reclamo se hizo ante autoridades municipales y de la administración portuaria, firmando una serie de acuerdo ante amenazas de los pescadores de bloquear los trabajos del puente.
Los reclamantes argumentan que la construcción del puente ha propiciado el incremento de desechos en el lecho del río desde concreto, metales y otros sólidos que dañan los pertrechos de pesca; ante ello, surgió el acuerdo con el director de la API de que se hará una limpieza de la zona con el apoyo de buzos, mencionando que la construcción del puente cumple con todas la normatividad del caso, estimando el funcionario que en octubre estaría culminando la obra, lo que daría lugar a la liberación de cualquier obstáculo en el río.
Otro argumento de los pescadores que se dicen afectados por la actividad portuaria es el enrrocamiento de protección que se hace en la desembocadura del río Balsas en su brazo izquierdo; sin embargo, el director de la API se negó a parar los trabajos, pues aseveró que se instalan rocas en 200 metros de frente marino para protección de la zona portuaria. No obstante, la queja de los pescadores gravita en la intención de que la API les apoye en la instalación de bloques de concreto el lugares determinados del mar para arrecifes artificiales.
La API señaló que valorarían tal petición, en tanto al enrrocamiento dijo que una vez que concluyan los 200 metros pendientes, se analizarían otras obras del mismo giro en torno a los supuestos efectos que dicen provocan en algunas especies como la sardina, hasta el caso de la anidación de tortuga marina, que según los pescadores se da en la zona, aunque no se tiene reconocido el lugar como zona de desove.
Lazaro cardenas, 19 de julio.- Pescadores de la desembocadura del río Balsas exigieron las autoridades la limpieza del lecho del río en donde se construye el puente Bicentenario, y la suspensión de trabajos de enrrocamiento en las inmediación de la barra de San Francisco, argumentando que afecta a la migración de sardina para el desove, que adquieren los pescadores como carnada. El reclamo se hizo ante autoridades municipales y de la administración portuaria, firmando una serie de acuerdo ante amenazas de los pescadores de bloquear los trabajos del puente.
Los reclamantes argumentan que la construcción del puente ha propiciado el incremento de desechos en el lecho del río desde concreto, metales y otros sólidos que dañan los pertrechos de pesca; ante ello, surgió el acuerdo con el director de la API de que se hará una limpieza de la zona con el apoyo de buzos, mencionando que la construcción del puente cumple con todas la normatividad del caso, estimando el funcionario que en octubre estaría culminando la obra, lo que daría lugar a la liberación de cualquier obstáculo en el río.
Otro argumento de los pescadores que se dicen afectados por la actividad portuaria es el enrrocamiento de protección que se hace en la desembocadura del río Balsas en su brazo izquierdo; sin embargo, el director de la API se negó a parar los trabajos, pues aseveró que se instalan rocas en 200 metros de frente marino para protección de la zona portuaria. No obstante, la queja de los pescadores gravita en la intención de que la API les apoye en la instalación de bloques de concreto el lugares determinados del mar para arrecifes artificiales.
La API señaló que valorarían tal petición, en tanto al enrrocamiento dijo que una vez que concluyan los 200 metros pendientes, se analizarían otras obras del mismo giro en torno a los supuestos efectos que dicen provocan en algunas especies como la sardina, hasta el caso de la anidación de tortuga marina, que según los pescadores se da en la zona, aunque no se tiene reconocido el lugar como zona de desove.
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