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El Mapa de Proyectos 2013-2018 para el sistema portuario mexicano, anunciado
por el coordinador general de Puertos y Marina Mercante, Guillermo Ruiz de
Teresa, combina una serie de obras que se vienen arrastrando desde sexenios
pasados.
Hace
diez años, cuando Jorge González Olivieri fungía como director de la
Administración Portuaria e Integral de Veracruz, se retomó el proyecto de
ampliación de dicho recinto, obra que desde 1994 fue incluida en el primer Programa
Maestro de Desarrollo del puerto.
Sin
embargo, al paso de los años, se toparía con una disputa ambiental que
impediría la consolidación de la obra en una extensión de 100 hectáreas hacia
Bahía de Vergara. El problema surgió cuando un grupo de ambientalistas se
enfrentó a la construcción del nuevo puerto veracruzano e interpuso un amparo.
Ahora, luego de cinco años desde que llegó el actual director de la API, Juan
Ignacio Fernández Carbajal, no se ha podido destrabar el decreto para iniciar
la obra.
Tal
parece que este conflicto va más allá del tema medioambiental, dice Héctor López
Gutiérrez, director del despacho Ingeniería, Operación y Equipos Especializados
(Inopesa), pues se combinan varios factores: las buenas intenciones de
preservar el medioambiente y los intereses políticos de "grupúsculos que viven
del chantaje ambiental”.
Recuerda
que desde el 2000, cuando Inopesa ganó el concurso para hacer el estudio de
localización de la ampliación de Veracruz, se eligió la zona de Bahía de
Vergara, donde el problema era el parque arrecifal veracruzano, pero se
hicieron los estudios y se determinó que los arrecifes estaban muertos, por lo
que no hay ningún impedimento ambiental.
El
ex funcionario de la SCT considera que para desarrollar los puertos del Golfo
se debe replantear el esquema de competitividad de la zona, es decir, ferrocarril,
puertos, carreteras, todo lo que se refiere a conectividad y la relación
puerto-ciudad.
La
inversión que anunció la Coordinación de Puertos y Marina Mercante para dar
solución a la saturación del puerto de Veracruz será de 21 mil 213 millones de
pesos, pero la Administración Portuaria Integral (API), en voz de su gerente
comercial, Alejandro Couttolenc Villar, ha confirmado que el gasto será de unos
60 mil millones de pesos, de los cuales el 65% corresponde al sector privado y
el 35% a inversión pública. Este proyecto de ampliación es parte del programa
de inversión por más de 62 mil 381 millones de pesos que tiene planeado el
gobierno de Enrique
Peña
Nieto en los puertos mexicanos durante su sexenio, en el cual se incluye la
construcción de tres nuevos puertos, 12 terminales especializadas y cinco
ampliaciones.
EL PLAN EN PUERTOS
Se
invertirán 14 mil 994 millones de pesos en cinco ampliaciones: la modernización
de los puertos de Mazatlán, Ciudad del Carmen y Seybaplaya; ampliación y
modernización del puerto de Altura en Progreso y, ampliación del Puerto de
Altamira.
Además,
se destinarán 17 mil 614 millones de pesos en 12 terminales especializadas,
señala el coordinador general de Puertos y Marina Mercante, Guillermo Ruiz de
Teresa.
"Los
puertos deben de ser más de dos veces alrededor de lo que crece la economía
para no convertirse en un cuello de botella y eso es lo que tenemos que hacer,
abrir las posibilidades para que los puertos no sean un obstáculo para el crecimiento
de la economía", dice.
Comenta
que para algunos proyectos se estará utilizando el esquema de Asociaciones Público
Privadas (APPs), mismas que considera como un adelanto de la nueva Ley de
Puertos.
En
la inversión anunciada resalta la modernización al puerto de Guaymas, en la
cual se hará una inversión de 7 mil 234 millones de pesos y es una de las
grandes apuestas que retomará Ruiz de Teresa durante su gestión, aunque primero
tendrá que solucionar un problema jurídico que hay sobre un terreno en el que
se pretende ampliar el recinto, el cual fue sesionado a un particular que no permite el uso del espacio
que por ley le corresponde.
En
el proyecto se pretende la construcción de una terminal de contenedores para
atender la demanda proveniente de Arizona, Estados Unidos, y aumentar su
capacidad de manejo de granel mineral y fluidos, sin embargo, el director del
despacho TyH Consultores, Andrés Jujnovsky, advierte que se trata de una obra
que no está sustentada en un estudio de comportamiento de la carga, del mercado
y de inversionistas interesados.
TUXPAN, EL "PLAN B"
Otra
de las inversiones anunciadas se dará en el puerto de Tuxpan, con un
presupuesto estimado en 4 mil 938 millones de pesos. No es cualquier obra,
representa el "plan B" para el coordinador de Puertos en caso de que
no se consolide el nuevo recinto en Veracruz.
En
Tuxpan se construirá un muelle público para contenedores y carga general. Para
el director de TyH Consultores, una terminal pública sobre un terreno privado
en Tuxpan afectará la operación de dos puertos. "La carga en Veracruz
crece entre 3 y 4% anual, carga nueva no hay, transbordos no hay, entonces
afectas a Veracruz o afectas a Altamira", refiere.
¿Y LÁZARO?
Aunque
es un proyecto heredado por la gestión de Felipe Calderón, la inversión
anunciada por Ruiz de Teresa para construir la segunda terminal especializada
de contenedores en el puerto es de 5 mil 795 millones de pesos y corresponde a
APM Terminals, mientras que para la de autos serán 525 millones de pesos que
invertirá SSA Marine.
Sin
embargo, en el caso de la segunda Terminal Especializada de Contenedores (TEC 11),
existen dos sentencias definitivas que la califican de ilegal.
Ruiz
de Teresa ha dicho que la empresa Hutchison Port Holdings (HPH) -operador de la
primera terminal de contenedores en el recinto- frenó con "artilugios"
la obra en el puerto michoacano, por lo que la construcción continúa.
En
este tema, Andrés Jujnovski explica que la oferta de infraestructura no genera
la demanda. "No es como poner una tienda de conveniencia en cada esquina
donde todas van a tener clientes. Acá, el mercado es uno y no puedes inventar
nada. Si dejamos a APM Terminals en Lázaro Cárdenas, automáticamente le quitará
a HPH la mitad o parte de su mercado", sostiene.
Se
pretende que la TEC II sea la primera terminal automatizada de América Latina,
que permita atender buques con capacidad mayor a 15 mil TEUs, categoría súper
post panamax y alcanzar una productividad máxima de carga/descarga de 200
contenedores por hora, contra los 85 que se mueven actualmente.
MANZANILLO AL DOBLE
Con
la inversión de 7 mil 300 millones de pesos para construir la segunda Terminal
Especializada de Contenedores -que opera la filipina Contecon-, se estima que
para final del sexenio Manzanillo duplique el manejo de contenedores hasta
llegar a cuatro millones de TEUs (contenedor de 20 pies).
En
las cifras que contempla la SCT para el sexenio se suma la inversión de recursos
públicos por dos mil 500 millones de pesos para labores de dragado y
conectividad.
Así,
de los 62 mil 381 millones de pesos que se invertirán para el desarrollo de
infraestructura portuaria durante esta administración, sólo el 27.7% saldrá del
presupuesto federal y el 72.3% de inversión privada y algunas obras están en
construcción desde el sexenio anterior.
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