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Fuente: LNE
Ha empezado la cuenta atrás para la entrada en servicio de la autopista del mar entre Gijón y Nantes-Sain Nazaire, la primera de las dos conexiones marítimas atlánticas para el transporte de tráfico rodado, mercancías y viajeros entre la costa norte española y la fachada litoral occidental gala. El Consejo de Ministros tomó ayer el acuerdo de remitir a las Cortes el compromiso que firmaron España y Francia, rubricado por José Luis Rodríguez Zapatero y Nicolás Sarkozy el 26 de abril de 2009, para impulsar esas líneas. La aprobación por parte del Parlamento español y de la Asamblea Nacional Francesa es el último trámite para la apertura del nuevo enlace franco-asturiano.
El Consejo de Ministros tomó esta decisión después de que la Comisión Europea (CE) autorizó, el pasado 27 de enero, las subvenciones pactadas por España y Francia para la autopista del mar entre Gijón y Nantes Saint-Nazaire: 30 millones de euros, que sufragan a partes iguales cada uno de los dos países comprometidos con el proyectos. A esa partida, la CE ha sumado otros 4 millones de euros más con cargo a los fondos del programa comunitario «Marco Polo II», con el que las autoridades comunitarias tratan de modernizar y racionalizar el sistema de transporte europeo, con un mayor protagonismo para los movimientos de mercancías por barco y ferrocarril.
La autopista del mar entre Asturias y Nantes, que la CE denomina Fres Mos, es la única de las dos previstas que tiene por el momento la autorización europea. La ayudas a la otra conexión, la que unirá Vigo y Nantes-Saint Nazaire, con enlaces hacia Algeciras y Le Havre, aún no tiene el visto bueno de la CE. Aunque reciba la aprobación por parte del Parlamento español, esa línea tiene aún que pasar obligatoriamente la tramitación europea.
Tal y como publicó este diario el pasado jueves, Acciona Transmediterránea, adjudicataría de la conexión viguesa, también llamada Atántica, no prevé tener lista su conexión con Nantes-Saint Nazaire hasta al menos el verano de 2011. La decisión de PSA de entregar sus tráficos de Peugeot y Citroën a Compañía Marítima Hispano-Francesa, que eran la base de la operación comercial de Transmediterránea para su autopista del mar, ha complicado el proyecto de la naviera española.
GLD Atlantique, concesionaria de la línea entre El Musel y Nantes-Saint Nazaire tiene en cambio listos todos los preparativos para empezar a operar este año, según han manifestado a este periódico sus directivos. La compañía, con capital franco-italiano de los armadores Louis Dreyfus y Grimaldi, además de la participación de la Autoridad Portuaria de Gijón y de la de Saint Nazaire, tiene previsto ofrecer tres servicios semanales con un buque mixto, en el que también habrá camarotes para turistas.
Los responsables de El Musel tienen pendiente de adjudicación la obra para la nueva terminal de la autopista del mar, por la que pugnan cinco empresas. La instalación, con un presupuesto de adjudicación de 463.927 euros, se construirá en los muelles de La Osa, frente a la rampa para embarque y desembarco de tráfico rodado (ro-ro) , y debe estar construida en nueve semanas a partir del fallo del concurso.
La autopista del mar Fres Mos debe canalizar en su primer año de servicio 25.000 de los camiones que ahora utilizan las saturadas carreteras de los Pirineos.
Ha empezado la cuenta atrás para la entrada en servicio de la autopista del mar entre Gijón y Nantes-Sain Nazaire, la primera de las dos conexiones marítimas atlánticas para el transporte de tráfico rodado, mercancías y viajeros entre la costa norte española y la fachada litoral occidental gala. El Consejo de Ministros tomó ayer el acuerdo de remitir a las Cortes el compromiso que firmaron España y Francia, rubricado por José Luis Rodríguez Zapatero y Nicolás Sarkozy el 26 de abril de 2009, para impulsar esas líneas. La aprobación por parte del Parlamento español y de la Asamblea Nacional Francesa es el último trámite para la apertura del nuevo enlace franco-asturiano.
El Consejo de Ministros tomó esta decisión después de que la Comisión Europea (CE) autorizó, el pasado 27 de enero, las subvenciones pactadas por España y Francia para la autopista del mar entre Gijón y Nantes Saint-Nazaire: 30 millones de euros, que sufragan a partes iguales cada uno de los dos países comprometidos con el proyectos. A esa partida, la CE ha sumado otros 4 millones de euros más con cargo a los fondos del programa comunitario «Marco Polo II», con el que las autoridades comunitarias tratan de modernizar y racionalizar el sistema de transporte europeo, con un mayor protagonismo para los movimientos de mercancías por barco y ferrocarril.
La autopista del mar entre Asturias y Nantes, que la CE denomina Fres Mos, es la única de las dos previstas que tiene por el momento la autorización europea. La ayudas a la otra conexión, la que unirá Vigo y Nantes-Saint Nazaire, con enlaces hacia Algeciras y Le Havre, aún no tiene el visto bueno de la CE. Aunque reciba la aprobación por parte del Parlamento español, esa línea tiene aún que pasar obligatoriamente la tramitación europea.
Tal y como publicó este diario el pasado jueves, Acciona Transmediterránea, adjudicataría de la conexión viguesa, también llamada Atántica, no prevé tener lista su conexión con Nantes-Saint Nazaire hasta al menos el verano de 2011. La decisión de PSA de entregar sus tráficos de Peugeot y Citroën a Compañía Marítima Hispano-Francesa, que eran la base de la operación comercial de Transmediterránea para su autopista del mar, ha complicado el proyecto de la naviera española.
GLD Atlantique, concesionaria de la línea entre El Musel y Nantes-Saint Nazaire tiene en cambio listos todos los preparativos para empezar a operar este año, según han manifestado a este periódico sus directivos. La compañía, con capital franco-italiano de los armadores Louis Dreyfus y Grimaldi, además de la participación de la Autoridad Portuaria de Gijón y de la de Saint Nazaire, tiene previsto ofrecer tres servicios semanales con un buque mixto, en el que también habrá camarotes para turistas.
Los responsables de El Musel tienen pendiente de adjudicación la obra para la nueva terminal de la autopista del mar, por la que pugnan cinco empresas. La instalación, con un presupuesto de adjudicación de 463.927 euros, se construirá en los muelles de La Osa, frente a la rampa para embarque y desembarco de tráfico rodado (ro-ro) , y debe estar construida en nueve semanas a partir del fallo del concurso.
La autopista del mar Fres Mos debe canalizar en su primer año de servicio 25.000 de los camiones que ahora utilizan las saturadas carreteras de los Pirineos.
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