Fuente: ABC
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, corroboró la existencia de «conversaciones» con la conocida empresa Petróleos Mexicanos (Pemex) con el objetivo de intentar una «colaboración positiva de cara al futuro» con los astilleros gallegos. Consciente de la complicada situación que atraviesa este sector, indicó que estos contactos «son fluidos en los últimos días». El anuncio lo realizó en una comparecencia conjunta con el presidente Felipe Calderón, muy breve. El escenario en el que se produce no es baladí, precisamente por el panorama de marcada dificultad en el que está inmerso el naval gallego, un extremo compartido por los astilleros públicos de Navantia en la Ría de Ferrol —actualmente sin carga de trabajo— y por los de la Ría de Vigo —Vulcano y Barreras—, que están a la espera de una solución alternativa al «tax lease».
En este contexto, Rajoy explicó que había repasado con Calderón los «principales aspectos» de la relación entre España y el país latinoamericano, basada, dijo, en un «diálogo político fluido y sincero». Bajo su criterio, sendos mandatarios «han puesto especial atención en las relaciones económicas y comerciales, puesto que la presencia empresarial de España en México tiene una enorme importancia y no deja de aumentar, al igual que la participación de firmas mexicanas en territorio español», apuntó.
De esta manera, Rajoy y Calderón abordaron fórmulas para mejorar las relaciones económicas entre ambos países, y para que las empresas aprovechen, a pesar de los tiempos difíciles, las oportunidades que ofrecen ambas economías. A modo de prueba, el presidente del Gobierno se refirió a las conversaciones mantenidas a lo largo de las últimas jornadas, en las que participó Feijóo con la empresa Pemex y con astilleros gallegos, «para intentar establecer una colaboración positiva de cara al futuro y que sea buena para todos».
Ayer se supo además que un estudio del Cluster Marítimo Español detecta oportunidades de negocio para varios sectores en el desarrollo de la energía eólica marina que se está dando en los países del Norte de Europa y se refiere, en concreto, a los astilleros gallegos, a los que anima a posicionarse para convertirse en constructores de buques y de infraestructuras para la explotación de este recurso. El informe, coordinado por Daniel Santos, ingeniero naval por la Universidad Politécnica de Madrid, destacó que el sector de la eólica marina está «emergiendo» y casi todas las instalaciones —hay 45 parques en nueve países— se encuentran en Europa, fundamentalmente en el norte.
Según sus estimaciones, en la próxima década esta energía recibirá inversiones de 150.000 millones de euros y precisará la construcción de unos 40 buques hasta 2015. En este contexto, indicó que los astilleros gallegos cumplen las condiciones para hacer estos barcos, que son sofisticados y que tendrán costes superiores a los 100 millones.
Además de buques instaladores —en la actualidad hay cinco— serán necesarios cableros, buques hotel para alojar al personal que trabaje en las plataformas offshorey buques oceanográficos. A su juicio, los astilleros, que atraviesan actualmente una fuerte crisis, «no han detectado» la oportunidad de negocio que se presenta con esta energía, porque además de barcos pueden construir torres y otro tipo de infraestructuras de gran tamaño para las instalaciones eólicas, dada su ubicación, que permite la salida directa de las mismas al mar para su transporte.
A la espera de que Feijóo regrese del viaje de México, en el que acompaña a Mariano Rajoy, fuentes de la Xunta confirmaron que la reunión semanal de su Ejecutivo, que habitualmente se celebra los jueves, se aplaza hasta mañana. En cualquier caso, el presidente gallego regresará este jueves a la Comunidad. De hecho, su agenda oficial para la próxima jornada avanza que, a las 20.00, presidirá en Santiago el acto de entrega del «I Premio Internacional de Investigación Oncolóxica Ramiro Carregal-Fundación La Rosaleda».