Fuente: ABC
El viceministro del Trabajo, Abog. Raúl Mongelós, suscribió ayer las resoluciones que ratifican el contrato colectivo de condiciones de trabajo acordado entre el Cafym y la Sociedad de Marineros Unidos de la Marina Mercante Nacional, el Sindicato de Navegantes Marítimos del Paraguay y la Sociedad-Unión de Cocineros y Anexos Marítimos y Terrestres.
La homologación, legalización y el registro del contrato colectivo de condiciones de trabajo del sector naviero nacional se concretó en la víspera a través de las resoluciones 1046, 1047 y 1048, firmadas por el subsecretario de Estado de Trabajo y Seguridad Social, Raúl Mongelós, y el director general del Trabajo, Filemón Delvalle.
La Resolución 1046 es la ratificación del convenio entre el Centro de Armadores Fluviales y Marítimos (Cafym) y la Sociedad Unión de Cocineros y Anexos Marítimos y Terrestres (SUCAMT). La 1047 afecta al Sindicato de Navegantes Marítimos del Paraguay (Sinamapa), y la 1048 a la Sociedad de Marineros Unidos de la Marina Mercante Nacional (SMUMMN).
La Subsecretaría de Trabajo y Seguridad Social sostiene que esta homologación se concreta en cumplimiento de su cometido de arraigo constitucional, además destaca y valora el esfuerzo de las partes para lograr los consensos que reflejan la voluntad genuina, participativa y legítima de los actores.
Por su parte, el titular de la subsecretaría, Raúl Mongelós, aclaró que el proceso administrativo de registro y homologación llevó un tiempo prudencial debido a las observaciones y cuestionamientos formulados por otros gremios.
Sin pretextos
Según el Cafym, Guillermo Ehreke, este contrato colectivo echa por tierra uno de los pretextos esgrimidos por el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos de la Argentina, específicamente su secretario general, Enrique Omar Suárez, para boicotear el comercio exterior paraguayo en el puerto de Buenos Aires hacia finales del año pasado.
Suárez –considerado un “verdadero peligro”, no solo para el Paraguay, sino también en la Argentina– volvió a amenazar recientemente con bloquear a los buques de bandera paraguaya en su supuesto afán de instaurar “la justicia social en el país hermano” (el Paraguay).
“Si es por justicia social, nadie puede aducir déficit alguno en este sentido para perjudicar a nuestro país”, expresó por su parte el presidente del Cafym.
Añadió que este convenio colectivo, que es un marco al que deben ajustarse todas las empresas navieras, que le agregarán luego sus especificidades, contempla importantes logros para los trabajadores de embarcaciones de bandera nacional.
El Código Laboral obliga al pago del salario mínimo vigente, pero mediante este contrato colectivo, los marineros tienen una escala superior, con una remuneración adicional que no podrá ser inferior al 10% del mínimo para el cabotaje nacional, y 40% para viajes internacionales. Para los marineros operadores de bomba ese adicional no debe bajar del 20%, mientras que para contramaestres y timoneles enrolados, lo acordado es el 30% del mínimo.
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