El Frente Unido de Marinos Mercantes, AC (FUMMAC), documentó, ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), nueve casos de trabajadores originarios de Veracruz fallecidos en plataformas y embarcaciones petroleras que operan en la sonda de Campeche
Érick Viveros
Fuente: El Universal
VERACRUZ, Ver.— El Frente Unido de Marinos Mercantes, AC (FUMMAC), documentó, ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), nueve casos de trabajadores originarios de Veracruz fallecidos en plataformas y embarcaciones petroleras que operan en la sonda de Campeche, cuyos familiares no han recibido las indemnizaciones que señala la ley.
El inspector de la Federación Internacional del Trabajo (ITF, por sus siglas en inglés), Enrique Lozano Díaz, señaló que en los últimos dos años las empresas contratistas han intentado evadir el pago de las compensaciones correspondientes. Dijo que familiares de trabajadores muertos y de algunos desaparecidos, ya desesperados, exigen el pago de las remuneraciones.
Explicó que las denuncias hechas en los últimos meses ante el Congreso de la Unión e instancias de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, atrajeron a la CNDH.
El viernes pasado, el organismo autónomo envió a los visitadores Hugo Torruco y Agustín Lara, quienes se entrevistaron con familiares de los obreros y marinos fallecidos en la sonda de Campeche.
Ahí, Lozano Díaz explicó que normas internacionales estipulan indemnizaciones de hasta 85 mil dólares por cada marinero muerto; además, si tiene hijos menores de 18 años, la compañía contratista paga hasta 15 mil dólares por cada uno.
“En México tenemos datos de que algunas empresas, como Servicios Marinos Protexa, liquidan con cerca de 450 mil pesos a cada obrero fallecido en accidentes, muy por debajo de lo que realmente deben pagar, cuando a los marinos fallecidos de Pemex les ha pagado hasta un millón 700 mil pesos”, indicó.
El inspector de la ITF señaló que la empresa Oceanografía, SA de CV, es una de las firmas que opera con el mayor número de irregularidades en cuanto a la seguridad de sus trabajadores se refiere. “Cuando sucedió lo de la plataforma Usumacinta, al poco tiempo hubo 22 despedidos de esa empresa porque reclamaron sus derechos laborales, les debían dos quincenas de sueldo y se le hizo fácil a la empresa liquidarlos”.
Suicidas en alta mar
Familiares de Antonio Hernández, marinero desaparecido del buque Ta’kuntah, propiedad de la compañía NW, SA de CV, denuncian que la empresa naviera se niega a pagar el seguro de vida bajo el argumento de que Antonio “se suicidó” y no falleció en accidente laboral.
“Los hechos ocurrieron el 22 de julio de 2005, en la sonda de Campeche; se nos hace una falta de respeto por parte de los ejecutivos de la empresa el asegurar que nuestro hermano se suicidó; él era alegre, dedicado a su trabajo y a mi padre, que ya rebasa los 90 años”.
Versiones de compañeros de la víctima, subraya Juana, señalan que Antonio pudo haberse golpeado o accidentado en alguna parte de la borda del buque Ta’kuntah, cayendo a las aguas profundas del golfo de México. Dicha versión es rechazada —a la fecha— por la compañía NW, y sostiene la teoría del suicidio.
Panorama desolador
Otro panorama desolador sortean Maricela Jiménez Olán y Mariana Calderón Hernández, madre y esposa de Gualberto Márquez Jiménez, la única víctima del incendio y hundimiento de la embarcación Seba’an. Con rostros cansados denuncian que a la fecha no han percibido el pago del seguro de vida por parte de Oceanografía, SA de CV.
Originaria de Nicolás Bravo, municipio de Paraíso, Tabasco, doña Marisela señala que la compañía sólo le pagó 75 mil pesos por los tres años de servicio de Gualberto Márquez Jiménez.
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