Fuente: ABC
La Dirección General de la Marina Mercante del Ministerio de Fomento ha sancionado con 510.000 euros al buque chino "Da Peng Wan" por haber realizado supuestamente un vertido ilegal al oeste de Mallorca, a 13 millas náuticas de Dragonera.
El vertido fue detectado por satélite el 30 de abril por la Agencia Europea de Seguridad Marítima y confirmado por el avión del centro territorial de Salvamento Marítimo en Baleares que lo avistó desde el aire, según ha detallado la Dirección General de la Marina Mercante a Efe.
Una vez localizada la mancha del vertido y tomada una muestra de la misma, Salvamento Marítimo comprobó mediante el sistema AIS (Automatically Identification System) los buques que habían navegado en la zona de la contaminación en las horas anteriores.
Tras una inspección de la embarcación sospechosa de haber realizado el vertido, la Capitanía Marítima de Tarragona, puerto desde el que había partido el buque con destino a Argelia y al que había regresado, abrió un expediente sancionador al "Da Peng Wan", con bandera de Hong Kong (China).
La compañía responsable del buque presuntamente infractor ha depositado en garantía 450.000 euros hasta que se resuelva el expediente y otros 60.000 para los posibles gastos derivados del vertido.
La Dirección General de la Marina Mercante ha señalado que la detección del vertido y el hallazgo del presunto infractor ha sido posible por las recientes mejoras tecnológicas aplicadas en Salvamento Marítimo.
De hecho la sanción al buque chino se suma a otra de 400.000 euros impuesta a un buque portugués, el "Covadonga", presunto autor de otro vertido realizado a 22 millas al oeste de Santander el pasado 27 de mayo.
Salvamento Marítimo ha invertido en medios tecnológicos y formación del personal para mejorar la detección de casos de contaminación y la localización de los buques que infringen las normas de protección del medio ambiente marino, para evitar estas malas prácticas.
La disuasión es la principal arma contra los vertidos ilegales, los conocidos "sentinazos", en los que los buques limpian sus tanques en alta mar para evitar el gasto de una limpieza en puerto.
Según dicho organismo, hasta hace poco esos buques que atravesaban aguas españolas, que están entre las más transitadas del mundo, sabían que no existía una vigilancia bien dotada.
En la actualidad se utiliza tecnología por satélite y medios aéreos y marítimos, así como sistemas de localización de embarcaciones mediante cálculo de derivas o análisis de las muestras recogidas.
Salvamento Marítimo realiza patrullas de vigilancia aérea con tres aviones EADS-CASA 235-300 ubicados en Santiago (fachada galaico-cantábrica), Valencia (fachada mediterránea) y Gran Canaria (zona SAR Canaria); y un avión Beechcraft Baron que opera desde Almería (fachada sur-Estrecho).
Estos aviones realizan patrullas en toda la costa española y son movilizados además en cuanto se detecta una contaminación por otros métodos como el satélite o el avistamiento desde otro buque.
Además de la propia multa, según la Dirección General de la Marina Mercante, también tiene efecto disuasorio el hecho de que, en cuanto se sospecha que un buque es el causante de un vertido ilegal, la embarcación es inmovilizada, con la consiguiente pérdida económica.
Una vez inmovilizado, si una inspección ofrece pruebas y se abre expediente sancionador, el buque puede permanecer retenido hasta que la compañía responsable se haga cargo del pago de una garantía que se mantendrá hasta el final del proceso sancionador.
Los casos más graves pueden ser sancionados desde un punto de vista penal y considerar a sus autores como causantes de un delito contra el medio ambiente, lo que podría conllevar penas privativas de libertad. EFE
El vertido fue detectado por satélite el 30 de abril por la Agencia Europea de Seguridad Marítima y confirmado por el avión del centro territorial de Salvamento Marítimo en Baleares que lo avistó desde el aire, según ha detallado la Dirección General de la Marina Mercante a Efe.
Una vez localizada la mancha del vertido y tomada una muestra de la misma, Salvamento Marítimo comprobó mediante el sistema AIS (Automatically Identification System) los buques que habían navegado en la zona de la contaminación en las horas anteriores.
Tras una inspección de la embarcación sospechosa de haber realizado el vertido, la Capitanía Marítima de Tarragona, puerto desde el que había partido el buque con destino a Argelia y al que había regresado, abrió un expediente sancionador al "Da Peng Wan", con bandera de Hong Kong (China).
La compañía responsable del buque presuntamente infractor ha depositado en garantía 450.000 euros hasta que se resuelva el expediente y otros 60.000 para los posibles gastos derivados del vertido.
La Dirección General de la Marina Mercante ha señalado que la detección del vertido y el hallazgo del presunto infractor ha sido posible por las recientes mejoras tecnológicas aplicadas en Salvamento Marítimo.
De hecho la sanción al buque chino se suma a otra de 400.000 euros impuesta a un buque portugués, el "Covadonga", presunto autor de otro vertido realizado a 22 millas al oeste de Santander el pasado 27 de mayo.
Salvamento Marítimo ha invertido en medios tecnológicos y formación del personal para mejorar la detección de casos de contaminación y la localización de los buques que infringen las normas de protección del medio ambiente marino, para evitar estas malas prácticas.
La disuasión es la principal arma contra los vertidos ilegales, los conocidos "sentinazos", en los que los buques limpian sus tanques en alta mar para evitar el gasto de una limpieza en puerto.
Según dicho organismo, hasta hace poco esos buques que atravesaban aguas españolas, que están entre las más transitadas del mundo, sabían que no existía una vigilancia bien dotada.
En la actualidad se utiliza tecnología por satélite y medios aéreos y marítimos, así como sistemas de localización de embarcaciones mediante cálculo de derivas o análisis de las muestras recogidas.
Salvamento Marítimo realiza patrullas de vigilancia aérea con tres aviones EADS-CASA 235-300 ubicados en Santiago (fachada galaico-cantábrica), Valencia (fachada mediterránea) y Gran Canaria (zona SAR Canaria); y un avión Beechcraft Baron que opera desde Almería (fachada sur-Estrecho).
Estos aviones realizan patrullas en toda la costa española y son movilizados además en cuanto se detecta una contaminación por otros métodos como el satélite o el avistamiento desde otro buque.
Además de la propia multa, según la Dirección General de la Marina Mercante, también tiene efecto disuasorio el hecho de que, en cuanto se sospecha que un buque es el causante de un vertido ilegal, la embarcación es inmovilizada, con la consiguiente pérdida económica.
Una vez inmovilizado, si una inspección ofrece pruebas y se abre expediente sancionador, el buque puede permanecer retenido hasta que la compañía responsable se haga cargo del pago de una garantía que se mantendrá hasta el final del proceso sancionador.
Los casos más graves pueden ser sancionados desde un punto de vista penal y considerar a sus autores como causantes de un delito contra el medio ambiente, lo que podría conllevar penas privativas de libertad. EFE
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