Daniel González Choto
Corresponsal en El Salvador
Fuente: Capital Financiero
Se haría ampliación para el atraque de barcos post-panamax
Se retrasararía nueve meses
La decisión de ampliar por lo menos un metro la profundidad de dragado del suelo marino y las plataformas del muelle, para recibir buques de mayor calado, retrasaría en casi un año el inicio de operaciones del puerto de La Unión en El Salvador.
Las modificaciones postergarían la inauguración a febrero del 2009, nueve meses después de lo que se había anunciado en mayo de 2005, cuando empezó la construcción de la terminal marítima, (véase recuadro: “Avance de obras”).
Pero el retraso todavía no es definitivo: aunque la decisión se tomó a inicios de diciembre del año pasado entre la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA) y el Consejo Departamental de alcaldes y diputados de La Unión, los contratistas japoneses y belgas aún estudian la propuesta.
El Financiero informó en julio del 2006 que el puerto lo construyen en conjunto las firmas Toa Corp. de Japón y Jan Denul de Bélgica.
“Aun en el supuesto de que lo aceptaran (el cambio de diseño) el convenio final tendría que ser aprobado por varias instancias locales”, dijo Santiago Aguilar, director del proyecto de CEPA.
La negociación de la nueva profundidad incluye a la empresa supervisora, la japonesa Nipon Coei. “Puede suceder que no haya acuerdo y tendríamos que continuar con el diseño original”, enfatizó Aguilar.
Más profundo
CEPA propuso a los japoneses y belgas aumentar la profundidad del muelle a 15 metros para que puedan atracar barcos de mayor calado, cambiar las grúas del tipo panamax a la clase post-panamax y aumentar el terreno para la captación de contenedores.
El director del proyecto reconoció que los cambios aumentarían el costo del puerto, pero declinó dar cantidades.
Juan José Llort, presidente de CEPA, destacó que la ampliación es necesaria para que la terminal tenga mayor capacidad para embarcaciones más grandes que el resto de puertos en Centroamérica, porque esto lo hace más competitivo.
De acuerdo con el empresario sería en febrero de 2007 cuando se defina si los contratistas y la supervisora aceptan las variaciones. En ese momento se daría a conocer cuánto de más deberá invertir CEPA en La Unión
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