viernes, 22 de diciembre de 2006

una nueva planta de las denominadas Marpol en España

Las incógnitas para desmantelar Delta
M. A. B./CÁDIZ
Fuente: lavozdigitsal.es


Una vez decidida la desmantelación de la planta de desgasificación de la empresa Delta, queda saber cómo y cuándo se llevará a cabo este proceso, el coste que supondrá para las arcas de Navantia (una empresa de capital público) esta operación, así como la de construir una nueva planta de las denominadas Marpol, es decir homologada por el Ministerio de Medio Ambiente y la Marina Mercante para descontaminar buques según el protocolo del Convenio Marpol.

Según una estimación de la empresa Ecogades, que llegó a realizar una oferta formal a Izar que luego desestimó para comprar la planta de Delta y construir una nueva, el coste de levantar una instalación como esta sería de unos cinco millones de euros.

Sin embargo, el consejo de administración de Navantia reunido ayer eligió a otra empresa de capital público, Emgrisa, para que se haga cargo de la limpieza, aunque desde esta compañía, que pertenece a la Sociedad Estatal de Participaciones Estatales, todavía se muestran prudentes sobre el proyecto al no haberse presentado aún una propuesta formal sobre el tema.

Un responsable de Emgrisa explicó a LA VOZ que el procedimiento habitual en estos casos es realizar lo que se denomina una «caracterización» -es decir, un estudio previo- tanto de la planta en si misma como de los terrenos circundantes. De esta forma se evalúa cualquier foco de riesgo y puede detectarse la posible «contaminación histórica». Hay que recordar que la instalación cuenta con más de 50 años de servicio.

Desde Ecologistas en Acción-Cádiz y Greenpeace se coincide con este diagnóstico y se recuerda que no se trata sólo de residuos líquidos sino también gaseosos que si no se controlan pueden producir un problema de contaminación atmosférica

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