Fuente: El Progreso
El presidente de Navantia, José Manuel Revuelta, ha asegurado hoy que el
contrato firmado con Pemex para la construcción de un buque hotel en
Ferrol "existe" y "es firme", con lo que ha despejado las dudas
relacionadas con declaraciones del director general de la mexicana, Juan
José Suárez Coppel.
La compañía petrolera mexicana Pemex firmó el 19 de septiembre los
contratos de construcción de dos hoteles flotantes en los astilleros de
las rías de Ferrol (por parte de Navantia) y de Vigo (Hijos de
J.Barreras) por un valor de casi 300 millones de euros.
Durante un encuentro con Efe, Revuelta ha dicho sentirse "muy satisfecho" con el contrato, si bien no ha desvelado su contenido, como piden los sindicatos, porque está protegido por cláusulas de confidencialidad.
Para el presidente, el encargo de Pemex supone, además, "una gran
oportunidad para Navantia", ya que confía en que "cuando se les entregue
el buque estén tan satisfechos que podamos haber firmado otro"
contrato.
De hecho, las necesidades de renovación de la flota de Pemex superan los 130 buques.
Por su parte, el consejero delegado de Navantia, Jaime de Rábago, ha
subrayado que el contrato "está firmado y en plena vigencia" y ha
añadido que, en estos momentos, la empresa trabaja "en el perfeccionamiento de las especificaciones técnicas que darán lugar en el corto plazo al corte de chapa".
Ha recordado que el contrato firmado con Pemex es el primero de
construcción naval que se suscribe desde hacía cinco años, por lo que
constituye un motivo para dar "tranquilidad y sosiego" a la comarca de
Ferrol.
Además, ha confirmado que Navantia trabaja en estos momentos junto a los
astilleros privados Barreras para optimizar las sinergias en la fase de
aprovisionamiento, "algo que da todavía más carta de credibilidad a las
realidades de las que venimos hablando desde el día 19 de septiembre",
fecha de la firma del contrato.
Empleo para 2.000 personas
El presidente ha apuntado que el equipo directivo de Navantia ha
trabajado durante todo el verano en la definición del contrato, que ha
calificado de "complicado", ya que "es un barco muy específico, con una
serie de características que hacen que las especificaciones técnicas
tengan una gran importancia".
"Tenemos que ser respetuosos" con las cláusulas de confidencialidad, ha insistido Revuelta, quien ha subrayado que "el objetivo final es que no haya ningún malentendido".
La construcción del buque supondrá una carga de trabajo de 1,5 millones de horas y dará empleo durante tres años a 1.000 personas de forma directa y a otras 1.000 en la industria auxiliar de manera indirecta.
Descontento de los trabajadores de Cádiz
Tras conseguir este contrato, el presidente ha asegurado que "los
trabajadores de todos los centros de producción de Navantia están
alegres de que haya carga de trabajo", en relación a las críticas de
algunos empleados de los astilleros de Cádiz porque el encargo de Pemex
iba a Galicia.
"No pueden mostrarse a disgusto de que sus compañeros de Ferrol" tengan
encargos, sino que "lo que ellos quieren es tener también carga de
trabajo".
Así, Revuelta ha señalado que los objetivos prioritarios de la dirección
de Navantia son conseguir carga de trabajo para todos los centros de la
compañía y fomentar la diversificación y la internacionalización del
grupo.
En ese sentido, ha recordado que la compañía trabaja en "más de
cincuenta acciones comerciales en 27 países, tanto en el campo militar
como el civil" y se ha mostrado "optimista" en que se puedan cerrar
algunos de estos "contratos potenciales" en los próximos meses.
La hipótesis de que la contratación de dos buques hotel por parte de
Pemex en astilleros gallegos pudiera frustrarse causó la pasada semana
una gran confusión entre los partidos políticos en Galicia, inmersos en
precampaña electoral.
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