Fuente: Sipse
Julián Miranda/SIPSE
COZUMEL, Q. Roo.- "Es menor el número de turistas que se extravíanen el mar de Cozumel que losvisitantes queM sufren algún incidente, no hay que maximizar la desaparición de los turistas". Así respondió el Eduardo Meixueiro Mancisidor, capitán de Puerto de Cozumel, ante los casos de desapariciones de buzos en este destino turístico.
En el año 2011 y lo que va del 2012 handesaparecido tres buzos, de los cuales dos casos ocurrieron en el presente año.
En torno a la desaparición de la turistanorteamericana Cristina Cassine, ocurrida a finales del mes de marzo 2012, habló que el caso fue remitido ante el Ministerio Público de la Federación (MPF) para continuar con lasinvestigaciones.
Personal de la Capitanía de Puerto informó quefamiliares de la desaparecida solicitaron la cancelación de las indagaciones.
En el último caso los operadores de la embarcación, el guía de buceo y el propietario de la embarcación, no fueron sancionados y se mantienen operando sin problemas, bajo el argumento de que "tenían en regla sudocumentación".
La mañana del 28 marzo de 2012, fue reportadacomo desaparecida la turista Cristina Cassine cuando buceaba en el arrecife Santa Rita, ubicada en la zona sur de la isla.
La mujer de 49 años de edad presuntamenteemergió a la superficie sin compañía del guía de buceo y no fue localizada por los tripulantes de la embarcación Sand Dollar Express.
En el operativo de búsqueda que se llevó a cabo durante 96 horas, en el cual participó personal del Sector Naval, Capitanía de Puerto, Parque Marino y siete lanchas de la empresa Sand Dollar Sport.
El primer día del extravió se sumó a la exploración un helicóptero de la Secretaria de Marina-Armada de México.
Sin embargo, las autoridades portuarias determinaron suspender la búsqueda activa e informaron de la desaparición a los puertos del área del Caribe, fase denominada búsqueda pasiva.
Meixueiro Mancisidor calificó como un "lamentable accidente" la desaparición, ya que la mujer presuntamente sufrió una descompensación que provocó que la arrastrara la corriente marina.
Los familiares solicitaron a la Capitanía de Puerto mediante una carta, suspender las investigaciones, pero el caso fue remitido ante el MPF para determinar si existe alguna responsabilidad contra los operadores y el guía de buceo de la empresa Sand Dollar Sport.
Reusó emitir información sobre los nombres de los empleados y las declaraciones que hicieron en torno a la desaparición.
Ante la negativa de los familiares, la autoridad portuaria no sancionó a la empresa proveedora del servicio turístico.
Con relación a las tres desapariciones de buzos sucedidas en el 2011 y 2012, solicitó no maximizar este tipo situaciones, ya que no son elevados los casos que se registran.
"Sólo se pierde aproximadamente el .001% anual de los visitantes 300 mil turistas que llegan a la isla para bucear" (sic).
La cantidad proporcionada por el capitán de puerto representa tres casos de desapariciones al año.
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