Fuente: Xornal de Galicia El naufragio de la embarcación Zirri ha puesto al descubierto las irregularidades de distintas Áreas de la Dirección General de la Marina Mercante El paso por la Dirección General de la Marina Mercante de Magdalena Alvarez y Felipe Martinez, lejos de mejorar los fundamentos del Sistema Mundial de Socorro, ha permitido que a pesar de las grandes inversiones realizadas se haya colapsado la Seguridad Marítima y la Seguridad de la Vida Humana en la Mar. El naufragio de la embarcación Zirri ha puesto en evidencia la gestión del Área de Radiocomunicaciones de la Dirección General de la Marína Mercante. Las continuas Resoluciones que modificaron distintos aspectos técnicos del Reglamento de Radiocomunicaciones han permitido que las embarcaciones de recreo puedan instalar con caracter voluntario los Subsistemas y Métodos del Sistema Mundial de Socorro. La estructura común para buques mercantes, pesca y recreo en las radiocomunicaciones marítimas exigida en el Reglamento de Radiocomunicaciones ha sido conculcada de forma definitiva. El resultado está a la vista y el Zirri ha sido la última demostración. El Subcomité por el Estado de Abanderamiento de la Organización Maritima Internacional ( OMI ), contempla centenares de naufragios como los acontecidos recientemente en las costas españolas, para, una vez analizadas sus causas, alentar a sus Estados Miembros a que transmitan las lecciones aprendidas y las preceptivas medidas correctoras al sector pesquero y náutica de recreo, con el único fin, de evitar más tragedias en la mar. Es decir la OMI, tiene todo perfectamente planificado para evitar accidentes graves, muy graves y muertes en la mar, pero, por lo demostrado hasta ahora, en España, nadie conoce la existencia de este Subcomité. Desde hace no pocos años, en el Parlamento Central y Autonómico, se han presentado centenares de iniciativas, desechadas por los Gobiernos de turno. Sirva como ejemplo la Proposición no de Ley relativa a la consolidación del Plan Nacional de Salvamento 2006/2009, del 19 de septiembre de 2007, cuando el Congreso de los Diputados, por iniciativa del BNG, instaba al Gobierno-Ministerio de Fomento a " promover y verificar la continua adaptación de los operadores del Sistema Mundial de Socorro (GMDSS) en los buques pesqueros " además de llevar a cumplimiento íntegro el epígrafe XII del Informe de conclusiones elaborado por la Subcomisión sobre las consecuencias derivadas del hundimiento del Prestige y aprobado por el Congreso, en lo relativo a la mejora de la seguridad marítima en los buques pesqueros y náutica de recreo. Una cosa será que se investiguen las causas del naufragio a efectos judiciales y otra muy diferente, los tiempos de respuesta para el rescate de supervivientes y desaparecidos en la mar. La investigación tardará su tiempo, pero los tiempos de respuesta deben ser investigados de inmediato accediendo los investigadores a todos los datos registrados y las pruebas que puedan ser facilitadas por los gestores del tráfico marítimo y Radio Costeras de Abertis Retevisión, al amparo del Nuevo Código de Normas Internacionales y Prácticas Recomendadas para la Investigación de Aspectos de Seguridad de Sucesos y Siniestros Marítimos, validado por OMI el 16 de mayo de 2008. Si el Ministerio de Fomento se ajustara - de forma inmediata - al Código y sus Prácticas Recomendadas, investigando las pruebas facilitadas por los Subsistemas y Métodos del Sistema Mundial de Socorro en lugares distantes de los siniestros marítimos, nos encontraríamos - por fin - con la Cadena de Responsabilidades que está ocasionando tanto desconcierto en el esclarecimiento de los naufragios.. El Código, deja bien claro que las investigaciones sobre seguridad marítima deben considerarse un vehículo para identificar no solamente los factores causales directos, sino también fallos en toda la cadena de responsabilidades. La eficacia o ineficacia de las Radio Balizas en los naufragios es una buena muestra del grado de desconocimiento de los que dicen velar por los intereses de la gente de la mar y ya va siendo hora de pedir ceses de los que vienen ocupando cargos relevantes en las distintas administraciones marítimas sin estar en posesión de las titulaciones y certificados de especialización del Convenio Internacional de Formación, Titulación y Guardias para Gente de Mar ( STCW 78/95 ).
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