Fuente: Sin Columna
Juan Esteban es bajo y fornido. Sus gafas de pasta y una larga y poblada barba canosa hacen juego con la piel curtida por el salitre y el aire del mar. Hace un par de años tuve la suerte de conocerle en Tenerife. Me ayudó con un reportaje en el que denunciábamos las condiciones infrahumanas en las que vivían los marinos abandonados por patronos sin escrúpulos en barcos de mala muerte lejos de sus familias y de su patria. Juan Esteban fue marino mercante, un auténtico hombre de mar que, una vez jubilado, ha decidido dedicar el resto de su vida a dignificar una profesión tan necesaria como invisible y maltratada. Hoy está al frente del Stella Maris de Santa Cruz de Tenerife. Un lugar en el que los marinos de todo el mundo que fondean en esta isla pueden usar internet, encontrar un grupo de personas que le acojan y solucionar algunos de sus problemas más urgentes. Incluso pueden participar en la oración que organizan todas las semanas.
Juan Esteban es un hombre enérgico, que contagia pasión y desprende una luz de bondad y coraje que te invitan, sin darte cuenta, a involucrarte en su lucha y defender su causa sin medir las consecuencias. Es tanta su verdad que cuando ayer recibí su correo se me retorcieron las tripas y me dije que lo tenía que contar.
Me dice Juan Esteban que en el mundo el 90 por ciento del transporte de mercancías se hace por vía marítima, y que sólo hay un millón y medio de marinos para desarrollar esta tarea, que la profesión cada vez encuentra a menos jóvenes dispuestos a echarse a la mar y que por eso la Organización Marítima Internacional (OIM) ha declarado 2010 como Año del Marino. Y como mi amigo Juan Esteban es así de optimista y de buena persona, me envía una lista de bondades relacionadas con el trabajo que él desempeñó durante tantos años: “Gracias a todos los marinos llega a nuestras mesas el alimento que produce la mar para todos los humanos.
A los marinos debemos el intercambio del trabajo y la creatividad entre los hombres y mujeres de todas las orillas. Estos hombres son fieles a una vocación a pesar de los riesgos y las carencias de bienestar en su trabajo. Los marinos son un ejemplo de abnegación y sacrificio, un instrumento de unión entre los pueblos, de convivencia entre las distintas culturas. Ellos encarnan la búsqueda y la libertad, el esfuerzo, la lucha, el compromiso, la disciplina y la solidaridad”.
Y yo, que estuve con Juan Esteban visitando el cementerio de barcos abandonados, hablando con los marinos filipinos y ucranianos, grabando las miserias ocasionadas por armadores sin escrúpulos… no puedo dejar de denunciar. Y denuncio tal cual. Haciendo mías las reivindicaciones de los hombres del mar:
1. Es necesario un servicio de atención al marino en puerto que respete el derecho y la dignidad de la persona, y el amparo de la ley en cualquier situación de conflicto, de modo especial en situaciones de abandonos de tripulantes.
2. Hacen falta unas leyes internacionales que aseguren su seguridad física, laboral, económica, de repatriación y bienestar integral. También en situación de piratería.
3. En la pesca, humanización de la vida familiar y regulación de la jornada laboral
4. Salarios en función del trabajo en la mar, no por el lugar de origen del marino.
5. Regulación eficaz del derecho al ejercicio ciudadano de votar.
6. Medios y servicios a bordo actualizados, incluyendo acceso a Internet y comunicación familiar.
7. Que los costes de formación que exige la seguridad a bordo sean financiados por la administración y las navieras.
8. Responsabilización de las oficinas de contratación de las situaciones de conflicto ajenas a la voluntad del marino (abandono de buques). No a las listas negras.
9. Salarios de acuerdo al esfuerzo y a la productividad que supone cada trabajo.
10. Vacaciones financiadas en función del tiempo de embarque.
11. Compromiso real de las administraciones, para asegurar el bienestar integral en el puerto, según Convenio 163 de OIT.
12. Normativa Internacional que exijan a las banderas de conveniencia el cumplimientos de criterios de seguridad, social, laboral y económica de acuerdo a lo establecido por OIT e ITF.
Más información en www.smaristenerife.org y en www.icma.as .