Fuente: La verdad de Tamaulipas
El Puerto de Tampico, uno de los más importantes del Golfo de México, enfrenta desde hace varios años una caída en el movimiento de carga, con la consiguiente pérdida de ingresos y empleos para los alijadores, concesionarios de los muelles desde hace casi un siglo.
Las estadísticas muestran que en el 2008 se manejó un total de 8 millones 831 mil toneladas de carga, contra 9,228 que hubo en el 2007, mientras que en años anteriores se observan acusados altibajos, principalmente en los años 2004 y 2005.
Ante ello, el Gremio Unido de Alijadores ha emprendido una campaña de promoción encaminada a conseguir nuevos usuarios para dicha terminal portuaria.
Ramón Martínez del Ángel, presidente del Consejo de Administración del Grupo Alijadores, dijo que dentro de las acciones de promoción, bajo el slogan de “Honestidad y Alto Rendimiento”, la Gerencia de Comercialización del Grupo Alijadores organizó una visita de negocios del 11 al 14 de noviembre en Monterrey, Nuevo León y Monclova, Coahuila, la cual permitió fortalecer vínculos y comunicación atractivos con importantes empresas e industrias de ambos estados.
Asimismo, fue abierta una oficina de promoción ubicada en Garza García, Nuevo León, a cargo del licenciado Héctor Lozano, quien coordinará la promoción y logística en esa región, de donde proviene una buena parte de la carga de importación y exportación.
El Lic. Adolfo Vicencio Espinoza, subdirector de Comercialización de Grupo Alijadores, detalló que esta unidad estará enfocada a mejorar la posición de puerto de Tampico en entorno nacional e internacional, indicando que el 25 por ciento de las importaciones, así como el 26 por ciento de las exportaciones son movilizadas por este recinto, gracias a la confianza y calidad en el servicio que proporciona Alijadores”.
Recordó que Grupo Alijadores lleva a cabo trabajos vinculados con la API Tampico, las asociaciones de agentes aduanales y navieros y empresas ferrocarrileras, a fin de hacer más atractivo el puerto comercial de Tampico.
INSTALACIONES VACIAS
Paulatinamente, el puerto comercial de Tampico se ha ido quedando vacío, primero por el surgimiento de la moderna terminal marítima en Altamira y segundo, por la crisis en el comercio marítimo internacional, agravada por la reciente debacle financiera mundial.
Para las autoridades portuarias y para los alijadores, el reto es atraer a los importadores y exportadores con infraestructura moderna y confiable, buenos servicios y tarifas competitivas.
Algunas voces provenientes del Colegio de Marinos y de Prácticos se han pronunciado a favor de que el puerto sea reconvertido de comercial a turístico o incluso pesquero, pero el Gobierno Federal, a través de la Dirección General de Puertos y Marina Mercante cuenta con importantes proyectos para ampliar la zona portuaria y aprovechar algunos nichos de oportunidad en la construcción de plataformas marinas, astilleros, etc.
Lo que Tampico ofrece a los usuarios son once muelles y 38, 688 metros cuadrados de patios y cobertizos.
Tres de las posiciones de atraque son públicas como el Muelle Fiscal tramos 10 y 11 y el Muelle Fiscal ubicado en el corazón de la ciudad, así como el área asignada a las compañías constructoras de plataformas marinas.
Los otros muelles son privados, operados por Astilleros de Marina, Cemex, Termimar, Minera Autlán, Petróleos Mexicanos, Proteínas de Tamaulipas (en la zona del Golfo), Terminales del Golfo y Astilleros Bender.
El puerto maneja diferentes tipos de carga, que va desde carga general, contenedores, graneles agrícolas, minerales, fluídos, petróleo y derivados, disponiendo de 331,730 metros cuadrados de patios y 6,472 de bodegas o cobertizos.
Por tratarse de un puerto de tipo fluvial, enfrenta serias desventajas frente a terminales más modernas como el vecino puerto industrial de Altamira, con capacidad para recibir barcos de grandes dimensiones.
Sus instalaciones están diseminadas a lo largo de 44 kilómetros de la ribera del río Pánuco, principalmente sobre la margen izquierda correspondiente al lado tamaulipeco, teniendo el canal de navegación un calado promedio de 33 metros de profundidad.
El destino del puerto de Tampico, alguna vez aclamado como el más importante del Golfo de México después de Veracruz, parece incierto, sin embargo los prestadores de servicios –como el GUA- le apuestan a reforzar la promoción para atraer nuevos clientes.
El Puerto de Tampico, uno de los más importantes del Golfo de México, enfrenta desde hace varios años una caída en el movimiento de carga, con la consiguiente pérdida de ingresos y empleos para los alijadores, concesionarios de los muelles desde hace casi un siglo.
Las estadísticas muestran que en el 2008 se manejó un total de 8 millones 831 mil toneladas de carga, contra 9,228 que hubo en el 2007, mientras que en años anteriores se observan acusados altibajos, principalmente en los años 2004 y 2005.
Ante ello, el Gremio Unido de Alijadores ha emprendido una campaña de promoción encaminada a conseguir nuevos usuarios para dicha terminal portuaria.
Ramón Martínez del Ángel, presidente del Consejo de Administración del Grupo Alijadores, dijo que dentro de las acciones de promoción, bajo el slogan de “Honestidad y Alto Rendimiento”, la Gerencia de Comercialización del Grupo Alijadores organizó una visita de negocios del 11 al 14 de noviembre en Monterrey, Nuevo León y Monclova, Coahuila, la cual permitió fortalecer vínculos y comunicación atractivos con importantes empresas e industrias de ambos estados.
Asimismo, fue abierta una oficina de promoción ubicada en Garza García, Nuevo León, a cargo del licenciado Héctor Lozano, quien coordinará la promoción y logística en esa región, de donde proviene una buena parte de la carga de importación y exportación.
El Lic. Adolfo Vicencio Espinoza, subdirector de Comercialización de Grupo Alijadores, detalló que esta unidad estará enfocada a mejorar la posición de puerto de Tampico en entorno nacional e internacional, indicando que el 25 por ciento de las importaciones, así como el 26 por ciento de las exportaciones son movilizadas por este recinto, gracias a la confianza y calidad en el servicio que proporciona Alijadores”.
Recordó que Grupo Alijadores lleva a cabo trabajos vinculados con la API Tampico, las asociaciones de agentes aduanales y navieros y empresas ferrocarrileras, a fin de hacer más atractivo el puerto comercial de Tampico.
INSTALACIONES VACIAS
Paulatinamente, el puerto comercial de Tampico se ha ido quedando vacío, primero por el surgimiento de la moderna terminal marítima en Altamira y segundo, por la crisis en el comercio marítimo internacional, agravada por la reciente debacle financiera mundial.
Para las autoridades portuarias y para los alijadores, el reto es atraer a los importadores y exportadores con infraestructura moderna y confiable, buenos servicios y tarifas competitivas.
Algunas voces provenientes del Colegio de Marinos y de Prácticos se han pronunciado a favor de que el puerto sea reconvertido de comercial a turístico o incluso pesquero, pero el Gobierno Federal, a través de la Dirección General de Puertos y Marina Mercante cuenta con importantes proyectos para ampliar la zona portuaria y aprovechar algunos nichos de oportunidad en la construcción de plataformas marinas, astilleros, etc.
Lo que Tampico ofrece a los usuarios son once muelles y 38, 688 metros cuadrados de patios y cobertizos.
Tres de las posiciones de atraque son públicas como el Muelle Fiscal tramos 10 y 11 y el Muelle Fiscal ubicado en el corazón de la ciudad, así como el área asignada a las compañías constructoras de plataformas marinas.
Los otros muelles son privados, operados por Astilleros de Marina, Cemex, Termimar, Minera Autlán, Petróleos Mexicanos, Proteínas de Tamaulipas (en la zona del Golfo), Terminales del Golfo y Astilleros Bender.
El puerto maneja diferentes tipos de carga, que va desde carga general, contenedores, graneles agrícolas, minerales, fluídos, petróleo y derivados, disponiendo de 331,730 metros cuadrados de patios y 6,472 de bodegas o cobertizos.
Por tratarse de un puerto de tipo fluvial, enfrenta serias desventajas frente a terminales más modernas como el vecino puerto industrial de Altamira, con capacidad para recibir barcos de grandes dimensiones.
Sus instalaciones están diseminadas a lo largo de 44 kilómetros de la ribera del río Pánuco, principalmente sobre la margen izquierda correspondiente al lado tamaulipeco, teniendo el canal de navegación un calado promedio de 33 metros de profundidad.
El destino del puerto de Tampico, alguna vez aclamado como el más importante del Golfo de México después de Veracruz, parece incierto, sin embargo los prestadores de servicios –como el GUA- le apuestan a reforzar la promoción para atraer nuevos clientes.
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