Fuente: Faro de Vigo
EFE/EUROPA PRESS - MADRID El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, garantizó ayer, en el Debate sobre el estado de la Nación, el compromiso del Ejecutivo con Galicia y, en concreto, con los astilleros, el desarrollo de las infraestructuras y el sector lácteo, con graves problemas de viabilidad de las explotaciones. En la segunda jornada del debate, Zapatero anunció que en los próximos días el ministro de Fomento, José Blanco, informará de los plazos y la financiación que contempla para desarrollar las infraestructuras comprometidas. Zapatero respondió así al portavoz del BNG, Francisco Jorquera, quien previamente le había exigido un "compromiso firme" para la conclusión de las infraestructuras que están en marcha en la comunidad gallega, como el AVE.
El líder socialista se comprometió a "volcar" todo su esfuerzo en mejorar la situación de los astilleros gallegos, en especial citó los de Fene. Jorquera le pidió en su primera intervención que incluya como "cuestión prioritaria" en la agenda de la Presidencia española de la UE el levantamiento del veto para que el astillero de Fene pueda construir buques para la marina civil. "Tengo un compromiso con los astilleros de Fene y voy a intentar cumplirlo", aseguró el jefe del Ejecutivo, quien insistió en que, aunque "no es fácil", va a "volcar todos sus esfuerzos" para que sea así.
Por otra parte, Jorquera instó a Zapatero a aprovechar la presidencia española de la UE para defender el sector lácteo español. El jefe del Ejecutivo también se referirió en su intervención a la situación del sector lácteo, para señalar que el Gobierno "conoce y es sensible" a la situación que está viviendo, por la disminución de la demanda de la leche y el aumento de las denominadas marcas blancas.
Plan para el sector lácteo
En este sentido, Zapatero dijo que confía en que el Plan Estratégico que ha elaborado para el sector el Ministerio de Agricultura, Medio Ambiente, Medio Rural y Medio Marino, y que tiene un horizonte hasta el 2015, pueda dar unos "resultados favorables".
Jorquera fue el encargado de abrir la segunda jornada del Debate del estado de la Nación con un discurso en el que dejó claro que su partido siempre tendrá un tono constructivo y respetuoso con el Gobierno, pero en el que advirtió que eso no se debe confundir con que tiene un "apoyo incondicional" del Bloque.
En su intervención, el diputado del BNG instó al Ejecutivo a que respete la pluralidad lingüística del Estado, y le recordó que en la actualidad no asume que el gallego, el catalán y el vasco también son lenguas con estatus oficial.
Por otra parte, Jorquera exigió al presidente del Gobierno cambios en la política fiscal para que disminuya la presión sobre las rentas más bajas y se acentúe en las más altas, con un impuesto sobre las "grandes fortunas con el fin de "incrementar la progresividad en el conjunto del sistema fiscal", exigiendo "un mayor esfuerzo fiscal a los sectores con más recursos". "No es justo que la presión fiscal recaiga sobre todo sobre las rentas de trabajo", agregó.
"No estamos hablando de una crisis que tenga su origen en los elevados costes salariales o del despido", quiso aclarar. Y subrayó: "Las voces que reclaman reformas en esta dirección no pretenden otra cosa que transferir íntegramente a los trabajadores los costes de una crisis que no originaron".
En este sentido, el presidente del Gobierno afirmó que existe una "coincidencia básica" con el BNG sobre la importancia de "hacer economías más productivas". Y dijo compartir que no son los trabajadores los causantes de esta coyuntura "ni deben ser los que más sufran las consecuencias más graves de la crisis".
Por último, Zapatero interpretó la disposición de Jorquera para "mejorar la calidad de la democracia y avanzar en el terreno de los derechos cívicos y sociales" como un posible adelanto del apoyo del BNG a futuros proyectos de ley, como el de la reforma del aborto. Sin embargo, el diputado del BNG quiso aclarar que por su parte "no hay un apoyo incondicional" al Gobierno y reiteró, entre otras, su petición de una política de izquierdas contra la crisis y de un compromiso "claro" con Galicia.
El líder socialista se comprometió a "volcar" todo su esfuerzo en mejorar la situación de los astilleros gallegos, en especial citó los de Fene. Jorquera le pidió en su primera intervención que incluya como "cuestión prioritaria" en la agenda de la Presidencia española de la UE el levantamiento del veto para que el astillero de Fene pueda construir buques para la marina civil. "Tengo un compromiso con los astilleros de Fene y voy a intentar cumplirlo", aseguró el jefe del Ejecutivo, quien insistió en que, aunque "no es fácil", va a "volcar todos sus esfuerzos" para que sea así.
Por otra parte, Jorquera instó a Zapatero a aprovechar la presidencia española de la UE para defender el sector lácteo español. El jefe del Ejecutivo también se referirió en su intervención a la situación del sector lácteo, para señalar que el Gobierno "conoce y es sensible" a la situación que está viviendo, por la disminución de la demanda de la leche y el aumento de las denominadas marcas blancas.
Plan para el sector lácteo
En este sentido, Zapatero dijo que confía en que el Plan Estratégico que ha elaborado para el sector el Ministerio de Agricultura, Medio Ambiente, Medio Rural y Medio Marino, y que tiene un horizonte hasta el 2015, pueda dar unos "resultados favorables".
Jorquera fue el encargado de abrir la segunda jornada del Debate del estado de la Nación con un discurso en el que dejó claro que su partido siempre tendrá un tono constructivo y respetuoso con el Gobierno, pero en el que advirtió que eso no se debe confundir con que tiene un "apoyo incondicional" del Bloque.
En su intervención, el diputado del BNG instó al Ejecutivo a que respete la pluralidad lingüística del Estado, y le recordó que en la actualidad no asume que el gallego, el catalán y el vasco también son lenguas con estatus oficial.
Por otra parte, Jorquera exigió al presidente del Gobierno cambios en la política fiscal para que disminuya la presión sobre las rentas más bajas y se acentúe en las más altas, con un impuesto sobre las "grandes fortunas con el fin de "incrementar la progresividad en el conjunto del sistema fiscal", exigiendo "un mayor esfuerzo fiscal a los sectores con más recursos". "No es justo que la presión fiscal recaiga sobre todo sobre las rentas de trabajo", agregó.
"No estamos hablando de una crisis que tenga su origen en los elevados costes salariales o del despido", quiso aclarar. Y subrayó: "Las voces que reclaman reformas en esta dirección no pretenden otra cosa que transferir íntegramente a los trabajadores los costes de una crisis que no originaron".
En este sentido, el presidente del Gobierno afirmó que existe una "coincidencia básica" con el BNG sobre la importancia de "hacer economías más productivas". Y dijo compartir que no son los trabajadores los causantes de esta coyuntura "ni deben ser los que más sufran las consecuencias más graves de la crisis".
Por último, Zapatero interpretó la disposición de Jorquera para "mejorar la calidad de la democracia y avanzar en el terreno de los derechos cívicos y sociales" como un posible adelanto del apoyo del BNG a futuros proyectos de ley, como el de la reforma del aborto. Sin embargo, el diputado del BNG quiso aclarar que por su parte "no hay un apoyo incondicional" al Gobierno y reiteró, entre otras, su petición de una política de izquierdas contra la crisis y de un compromiso "claro" con Galicia.
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