Remoción de buques

Fuente: Pesca y Puertos

Con el impulso dado por su inclusión entre los temas para los cuales el Poder Ejecutivo convocó a sesiones extraordinarias en el Congreso Nacional, el proyecto que modifica la Ley de Navegación dio un nuevo paso en la Cámara de Diputados de la Nación.

Si bien el proyecto original, enviado por el Poder Ejecutivo al Senado de la Nación en agosto de 2007, afectaba únicamente a los buques hundidos o abandonados en la Cuenca Matanza-Riachuelo, el que finalmente fue aprobado por la Cámara Alta es mucho más amplio ya que cubre las situaciones que se dan en todos los puertos del país, manteniendo condiciones especiales para la referida cuenca.

Fundamentalmente se propicia la modificación de los artículos 17, 18, 19, 20, 22, 23 y 24 de la Ley de Navegación Nº 20.094, de manera de agilizar la extracción, remoción, traslado o desguace de buques, artefactos navales y aeronaves de bandera nacional o extranjera, sus restos náufragos y los objetos o construcciones de cualquier naturaleza que constituyan un obstáculo o peligro para la navegación, para las operaciones portuarias, o un peligro inminente o potencial para la preservación del medio ambiente, de las vías navegables, de la infraestructura portuaria, o un impedimento para el libre escurrimiento de las aguas.

Con dictamen favorable de las comisiones emitido el 27 de noviembre de 2007, al día siguiente en el recinto del Senado se dio media sanción al proyecto que partió hacia la Cámara Baja.

Allí y estrenando su cargo de presidente de la Comisión de Intereses Marítimos, el diputado chubutense Mario Pais tomó la iniciativa y luego de algunas reuniones impulsó el dictamen en esa Comisión que se concretó el martes pasado.

“Se propicia una norma moderna que recepte las necesidades de la navegación y de la preservación ambiental, pues de sancionarse la ley no sólo se priorizará la remoción y disposición final de embarcaciones que afecten la navegación sino fundamentalmente aquellas que degraden o puedan afectar el ambiente”, explicó el diputado Pais al término de la reunión de Comisión.

“Desde el año 2003 a la fecha han sido varias las disposiciones adoptadas para poner nuevamente en valor el transporte marítimo de cargas”, agregó Pais convencido de que el transporte por buques debe volver a tener la jerarquía que le corresponde.

“De lo expuesto –reseñó el diputado– resulta importantísimo contar con una norma que establezca pautas claras sobre la extracción, remoción traslado, demolición o desguace de buques, artefactos navales y aeronaves náufragos o inactivos y objetos peligrosos en las aguas, ya sea por el entorpecimiento que accionan en vías navegables y la contaminación en la que derivan”.

Trascendental

Es el término que utilizó el doctor Víctor Colace cuando fue consultado por Pesca & Puertos sobre la modificación a la Ley de Navegación que se encuentra en Diputados. “Desde el punto de vista personal, creo que es muy positivo y es muy positiva también la intervención del diputado Mario Pais de Chubut”, señaló el abogado del Consorcio del Puerto de Bahía Blanca.

El especialista, que forma parte del grupo de abogados de distintas terminales portuarias que se reúnen periódicamente en el Consejo Portuario Argentino para discutir problemáticas en común, fue señalado como uno de los que más a debido lidiar con barcos inactivos o hundidos.

“Para los puertos es muy útil, es trascendental –señaló Colace– y para los abogados de los puertos es una herramienta muy útil, si la Prefectura Naval logra ponerla en práctica sin mucho trámite burocrático”.

Otro de los puntos que el abogado bahiense rescató es que “le fija plazos a los jueces, que muchas veces son quienes más dilatan estas cosas” y que “aunque en este proyecto no se le da una participación más activa a la administración portuaria, si bien acá no se especifica, quedaría habilitada a tener un rol de requeridor o activador, de alguna manera las administraciones portuarias podemos en el marco de esta modificación, requerir a Prefectura que actúe”.

“Ahora podríamos decirle: tipifíquese al buque tal como inactivo –aclaró Colace– e incluso podemos solicitarlo a un juez, que lo declare inactivo y le ordene a Prefectura que disponga del mismo”.

El nuevo texto es “mucho mejor de lo que tenemos, si bien no tiene el rango que tienen otras normativas, como la inglesa, que son más estrictas”, explicó el abogado para agregar que “con esto se les clarifica mucho el panorama a la Prefectura, la ley en su anterior redacción dejaba muchas puertas abiertas para recibir reclamos de los dueños o de quienes tenían intereses sobre el buque y ellos sufrieron muchos reveses judiciales”.

Asimismo, el especialista indicó a esta revista que “también está claro el tema del recobro del costo, cobra primero Prefectura para imputar a los gastos de reflotamiento, después Aduana por los impuestos si es de bandera extranjera, luego los costos portuarios y finalmente el propietario o quien tenga crédito contra el buque”.

“Es una herramienta que, si la Prefectura Naval Argentina como autoridad marítima le da un marco de trámite ágil, que no nos cabe duda que va a ser así porque es la primera interesada, nos va a dar la oportunidad de sanear los puertos que tenemos”, concluyó el doctor Víctor Colace.