Los barcos de recreo vierten 3,9 millones de toneladas residuales en el mundo ·· Los accidentes en cargueros de combustible derraman 100.000 toneladas ·· Según las jornadas sobre superpuertos, el 75% de las catástrofes se deben a errores humanos
Fuente: El Correo Gallego
PATRICIA HERMIDA • FERROL
Entre las imágenes más impactantes para los gallegos, destaca con fuerza la de un mar negro y grasiento. La costa atlántica europea, en la que nos encontramos, sufre los mayores derrames de hidrocarburos del mundo. De todos modos, la contaminación marina esconde a más implicados. Según los estudios medioambientales realizados por la ONU, contaminan más todos los yates del mundo que los accidentes de petroleros registrados en un año.
Pongamos las cifras sobre la mesa. Las embarcaciones de recreo vierten anualmente 3,9 millones de toneladas de residuos. Desvían el 25% de su combustible a la atmósfera y al agua. ¿Cómo puede ser cierta semejante cifra? Sólo Estados Unidos cuenta con 8 millones de embarcaciones de ocio y placer, el 10% del mundo. Comparemos con las toneladas vertidas al mar en accidentes petroleros en un año: unas 100.000.
Estos datos fueron revelados ayer por el profesor de Ciencias y Técnicas de la Navegación de la Universidade de A Coruña, el capitán mercante Felipe Louzán, durante las jornadas sobre El Superpuerto y Refugio de Galicia. Louzán dejó claro que "a contaminación mundial no mar procede nun 80% das actividades terrestres, os barcos son os que menos dano fan". Otro apunte: "Segundo a ONU, só o 3% desa contaminación mariña se debe a accidentes de petroleiros".
La restrictiva normativa internacional, siguiendo las regulaciones de la propia ONU, ha provocado un descenso de esos vertidos de los cargueros de combustible. Si en 1975 se vertían 31 gramos por cada tonelada, ahora sólo 3 gramos por tonelada: diez veces menos. "Non é certo que a contaminación mariña aumente", concluye Louzán.
Eso sí, toda lucha contra los tremendos accidentes del Urkiola o Mar Egeo de turno es poca. La zona atlántica europea ha registrado en los últimos 35 años 43 grandes derrames con más de 700 toneladas de fuel en cada uno. Louzán considera primordial investigar las causas reales. Y en el 75% las catástrofes se deben a errores humanos: "Por non corrixir unha deficiencia a tempo, malas manobras ou os propios fallos dende as administracións competentes".
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