Fuente: La Cronica de Hoy
Por: Daniel Blancas Madrigal Nacional
Era como “coquetear con la muerte”. Así describe Mauricio Pardo su experiencia como trabajador en el área de mantenimiento mecánico de la Compañía Perforadora Central, operadora de la plataforma Usumacinta de Pemex y cuyo dueño es el empresario Patricio Álvarez Morphy Camou.
En 14 años de trabajo en alta mar, de 1989 a 2003, perdió al menos 10 amigos por accidentes relacionados con la falta de seguridad laboral.
“Antes de subir a la plataforma le pedía la bendición a mi esposa y besaba con locura a mis hijos, me despedía con el miedo de nunca más volverlos a ver, iba a la bomba de tiempo”.
Cómo olvidar cuando quedó atrapado un mes —junto con otros compañeros— en la plataforma Grijalva, también propiedad de Perforadora Central…
“Al gerente y demás autoridades de la empresa les avisaron que venía un huracán, que había que tomar precauciones, pero no hicieron caso. Algunos pedimos ir a tierra, pero la respuesta fue: ustedes chínguenle, aquí no se para porque un minuto de descanso es pérdida de dinero para los patrones”.
Era Roxana, que azotó el Golfo de México en 1995. “Ya no pudimos salir, nos quedamos encerrados y si nos salvamos fue de milagro… Pero vivimos cosas muy feas ahí dentro, nos dimos cuenta que para los dueños éramos como animales, como unos puercos: la comida se acabó pronto y terminamos alimentándonos de desperdicios, de pedazos podridos de papa y chayote”.
A la falta de comida, ropa, zapatos, herramientas, guantes y demás equipo de seguridad, se sumaba el maltrato de los superiores: “Den gracias a Dios que se les dio la oportunidad de trabajar aquí, de otra manera ustedes y sus familias estarían muriéndose de hambre; si no rinden, si no producen, los vamos a correr y a ver cómo les dan de tragar a sus hijos”.
Eran amenazas constantes del supervisor Ricardo Cortina y del gerente Juan José González, “que estaban bien parados con los de arriba y eran los encargados de proteger los intereses empresariales”.
Pero era peor con los japoneses, dice don Mauricio.
“La compañía comenzó a firmar contratos con una empresa japonesa y trabajar con ellos sí que era jodido: de las agresiones verbales pasaban a las físicas, hubo compañeros que fueron golpeados por no comprender su idioma o hasta por mirarlos. Otros amigos nos contaban que ocurría lo mismo con los gringos, que también utilizaban los golpes”.
—¿Y el servicio médico? —se le pregunta.
—Sólo lo teníamos en plataforma y era muy deficiente. Había muchos accidentes y con alcohol y una gasita se resolvía todo. Pero bajando, quedábamos desamparados, ni siquiera nos protegían en el viaje a tierra y, por supuesto, nuestras familias no tenían ningún beneficio.
Ganaba 12 mil pesos mensuales, en un esquema de 14 días de trabajo por 14 de descanso. “Pero es una labor continua, de todo el día, a veces de 72 horas sin descanso”. Asegura que firmaba contratos en blanco por obra terminada y renuncias anticipadas.
En el 2003 don Mauricio y otros petroleros presentaron una denuncia ante la Contraloría Interna de Pemex y compartieron sus vivencias con diputados y senadores a nivel federal, por lo que desde el Poder Legislativo se ordenó una investigación que nunca rindió frutos.
“Cuando regresamos a Campeche ya estábamos despedidos, nos llamaron maricones y, sin más explicación nos echaron de la empresa sin beneficios ni liquidaciones, por eso los compañeros prefieren callar y resignarse al maltrato. Los que ya no aguantan se van para Estados Unidos o se quedan en su tierra, como decían los superintendentes, a morirse de hambre”…
Ya son 22 los muertos; Pemex no reconoce al último
[ Notimex en Campeche ]
La Subprocuraduría de Justicia de Campeche confirmó que aumentó a 22 el número de muertos por el accidente del pasado martes en la plataforma Usumacinta de Pemex, aunque la paraestatal está por confirmar su identidad.
De esta forma, de los 86 trabajadores que se hallaban en la plataforma, 63 han sido rescatados con vida y 22 fallecieron, y falta por localizar a un trabajador, en cuya búsqueda participan alrededor de dos mil elementos de la Secretaría de Marina por mar y aire.
La Subprocuraduría indicó que el cuerpo de otro de los trabajadores de Petróleos Mexicanos (Pemex), ya que portaba el mismo uniforme, fue hallado la víspera y será entregado a sus familiares en las próximas horas para ser trasladado a Veracruz.
Asimismo, refirió que los restos del cuerpo de otro trabajador aún permanecen en la morgue en espera de que lo identifiquen, y se trata de un torso sin cabeza ni extremidades.
Sin embargo, el vocero en Campeche, Javier del Carmen Delgado Peña, indicó que la paraestatal sólo reconoce hasta el momento 21 muertos y que desconoce del hallazgo de un cadáver más.
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