Fuente: Novedades de Quintana Roo
El 19 de julio del presente año lo que aparentaba una simple muerte por accidente, en las próximas horas se convertiría en uno de los casos más difíciles a los que se ha enfrentado la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
Se trata de la ejecución del empresario naviero Francisco Javier Fernández Ramírez, que hasta la fecha ni siquiera se ha confirmado qué calibre de bala fue la que lo mató. Las autoridades se encuentran con las manos vacías. El peritaje militar no resolvió las dudas de su asesinato.
A dos meses del homicidio de Fernández Ramírez, hasta el momento se ha entrevistado a unas 20 personas con relación a este caso, se ha realizado varios exámenes de balística, peritajes, entre otras pruebas más, pero el resultado ha sido el mismo, es decir, que la dependencia estatal a cargo de Bello Melchor Rodríguez y Carrillo no cuenta con una sola pista que los lleve a resolver este crimen.
Incluso la mesa especializada que lleva este caso ha llegado a pensar que tal vez fue una bala perdida la que privó de la vida al empresario naviero. Pues los análisis que han realizado no les ha revelado ningún indicio de quiénes pudieron haber asesinado a esta persona.
Las personas que declararon en su momento, no aportaron información importante. Mientras tanto las cuatro esquirlas que se le encontraron en el rostro al empresario, fueron analizadas por otras corporaciones policiacas, pero no arrojaron datos satisfactorios. Incluso se solicitó el apoyo de peritos del Ejército Mexicano para determinar qué calibre de bala era. Los resultados se los entregaron hace un par de semanas pero también fueron negativos. Los militares no pudieron decirles a los funcionarios de la Procuraduría a qué calibre pertenecen las esquirlas que se encontraron en el cuerpo de Fernández Ramírez.
Se tenía planeado desmantelar el vehículo en el que fue asesinado el empresario, pero hasta la fecha se encuentra en los patios de la dependencia estatal.
La madrugada del 19 de julio paramédicos de la Cruz Roja y personal de Tránsito, les notificaron de un accidente sobre el bulevar Luis Donaldo Colosio, a la altura de la agencia de vehículos Honda.
En el lugar encontraron un vehículo marca Cadillac, azul marino, con matrícula UVK-3166. En su interior estaba el cuerpo de una persona que fue identificada como Francisco Javier Fernández Ramírez, gerente general de la empresa marítima Caribbean Carnival.
Se pensaba que había fallecido al impactarse contra un poste de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), sin embargo cuando se le practicó la necropsia se le encontró en el cráneo esquirlas de bala, y determinaron que fue la causa de su muerte.
(Eric Galindo)
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