Fuente: La Hora
Para julio del 2008 los terminales marítimos, instalaciones portuarias y buques de tráfico internacional del país deben haber logrado mantener la certificación internacional del Código PBIP (Protección de Buques e Instalaciones Portuarias) obtenido en el 2004.
El Código PBIP se estableció tras el atentado a las Torres Gemelas el 11 de septiembre de 2002, y consiste que todo terminal marítimo e instalaciones portuarias debe obtener esta certificación a fin de que en dicho lugar puedan ingresar buques de tráfico internacional, de no ser así serán considerados no seguros y no podrá ingresar ninguna embarcación.
Igual situación se da con los buques de tráfico internacional que no obtengan la calificación, estos no podrán ingresar en ningún puerto considerado internacionalmente como seguro.
Para obtener la certificación del Código PBIP los buques como las instalaciones portuarias deberán cumplir con un sinnúmero de requisitos e inspecciones de seguridad por parte de la Secretaría de Protección Marítima (SEPROM), organismo adyacente a la Dirección General de la Marina Mercante (DIGMER).
Varios certificados
En el caso de la provincia de Esmeraldas se encuentran calificados como seguros los terminales marítimos del Oleoducto de Crudos Pesados (OCP), Sistema de Oleoducto Trans Ecuatoriano (SOTE) y el Terminal Marítimo de la Refinería de Esmeraldas (TMRE); así como las instalaciones portuarias del Consorcio Puerto Nuevo Milénium (Puerto Comercial) y la Superintendencia del Terminal Petrolero de Balao (SUINBA).
Desde la calificación de estos sitios considerados además como áreas estratégicas del país, el cumplimiento de las normativas de seguridad y las exigencias de la SEPROM se encuentran al mando de un Oficial de Protección de Instalaciones Portuarias (OPIP).
Desde julio del 2004 que las instalaciones portuarias del país lograron la certificación del Código PBIP, en Esmeraldas, quienes más han cumplido con lo solicitado en cuanto a seguridad son: el terminal de OCP y el Consorcio Puerto Nuevo Milénium al mando del puerto comercial.
A las otras tres instalaciones restantes: terminal del SOTE, SUINBA y TMRE, coincidencialmente estatales, les falta fortalecer sus equipos de seguridad, vulnerabilidades que no pueden ser reveladas por situaciones de seguridad.
Una vulnerabilidad que está a la vista de todos y que requiere una inmediata atención es el enrocado del TMRE, que nuevamente como sucedió el año pasado, se está yendo hacia la conocida poza de Esmeraldas
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